Vino albariño

El vino albariño se obtiene de una variedad de uva blanca denominada albariño producida en Galicia y Portugal. Según algunas teorías de los historiadores, la variedad de uva albariño fue introducida en el siglo XII de la mano de los monjes de la Orden de Cluny, una orden benedictina que llevó la uva al monasterio de Armenteira (Pontevedra). Este dato muestra la gran tradición enológica en torno al mundo del vino albariño.

La uva de la variedad albariño se caracteriza por sus granos medianos contenidos en racimos pequeños, su ciclo vegetativo es largo, siendo su maduración algo tardía. Su gran aroma permite obtener vinos de gran carga aromática que recuerdan a los albaricoques, las manzanas maduras… Aunque se encuentra en un clima húmedo, es una variedad poco sensible a problemas como el Mildiu o la Botritis, recordemos por ejemplo los vinos Tokaj, en ellos el ataque de la botrytis cinérea o podredumbre noble se produce como consecuencia del microclima húmedo que existe en las regiones de Furmint, Hárslevelü, Sárgamuskotály y Zéta, regiones de Hungría o Eslovaquia.

Los vinos albariños son vinos blancos de espectro amplio, ligeros e impresionantes, aunque se pueden percibir claras diferencias entres las distintas producciones, todo dependerá de si es un 100% variedad albariño o si se ha realizado un coupage con algunas de las variedades de uva aceptadas por la D.O, loureira, caíño blanco, torrontes, godello y treixadura. Desde 1960 se han estado replantando y recuperando las cepas autóctonas de la variedad albariño, sobre todo en la comarca de Salnés que actualmente contiene únicamente esta variedad de uva.

Durante varios años el albariño era un vino escaso y solicitado, nada que ver con lo que ocurre hoy en día, vino referente de calidad y prestigio constatado que muchos amantes de la enología disfrutan con verdadera pasión. En sólo 20 años se ha pasado de 14 bodegas productoras de albariño a 142 bodegas que actualmente están inscritas en la Denominación de Origen, aunque la mayoría de ellas se encuentran en la citada comarca de Salnés. Se trata de bodegas dotadas con las últimas tecnologías del mundo del vino, hecho que ha mejorado significativamente la calidad del producto final.

De hecho, las investigaciones y la aplicación de nuevas tecnologías es una contante en esta variedad de vino, no hace mucho conocíamos que tras varios años de investigación se había logrado desarrollar una levadura capaz de mantener la calidad de los vinos albariños al margen de la calidad de la cosecha o las inclemencias climatológicas. Aunque también hay que nombrar el trabajo realizado en el diseño y promoción, se puede nombrar por ejemplo Paco & Lola, un vino albariño de la Denominación de Origen Rías Baixas que ha logrado conquistar a los consumidores estadounidenses por su sabor y por el diseño original, una conjugación que hoy en día es algo muy valorado.

En el post de la Guía Proensa 2009 destacábamos la máxima puntuación de 100 puntos otorgada al Albariño do Ferreiro Cepas Vellas ’07, esta puede ser una referencia de la calidad de los vinos albariños, pero también queremos citar algún otro ejemplo. En el post Lista de los 100 mejores vinos del mundo podíamos comprobar que en el puesto número 86 se encontraba el Albariño Rias Baixas de Adegas Morgadío, Legado del Conde 2007, con una puntuación de 90.

Teniendo en cuenta que la cata había sido realizada por los expertos de Wine Spectator y la lista de vinos alcanzaba casi los 20.000 vinos de todo el mundo, situarse en la posición 86 no está nada mal. Como nota curiosa hay que nombrar la internacionalización de la uva de la variedad albariño, ésta empezó a cultivarse incluso en California en el año 2001 aprobando el Gobierno de Estados Unidos la denominación albariño. En este caso no es una noticia que pueda ser bien recibid,a ya que puede inducir a error a los consumidores de otros países, podemos nombrar por ejemplo el problema que existe con el Sherry falso, vino etiquetado bajo esta denominación pero producido en Estados Unidos. El hecho de que no exista una única legislación a nivel mundial sobre las denominaciones provoca este tipo de problemas.

Podemos disfrutar de magníficos vinos albariños a muy buenos precios, resultarán además vinos ideales para disfrutar con las recetas de Navidad de pescados o mariscos, la conjugación es impresionante. Los vinos albariños conquistan el paladar de los consumidores y los hechos así lo confirman, crecimiento de ventas, premios obtenidos, etc. No será extraño que el próximo año encontremos algún albariño en un puesto mucho más elevado dentro de las catas que realizan los expertos.

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