Un consumo elevado de alimentos ultraprocesados se asocia a un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2

Un reciente estudio realizado por investigadores de la Universidad de Cambridge y el Imperial College de Londres ha demostrado que el consumo elevado de alimentos ultraprocesados (UPF, por sus siglas en inglés) está estrechamente relacionado con un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Lo cierto es que esto no es una novedad, y entre varios estudios se puede citar uno del que hablábamos el año pasado sobre la relación de este tipo de alimentos con la multimorbilidad o la presencia de dos o más enfermedades crónicas en una misma persona, y la diabetes tipo 2 era una de esas enfermedades.

En esta nueva investigación se analizaron los datos de más de 300.000 personas durante un periodo de casi 11 años, y las concusiones obtenidas son bastante interesantes y reafirman la relación de los UPF con la diabetes tipo 2. Los expertos descubrieron que un aumento del 10% en la ingesta de alimentos ultraprocesados, se relaciona con un incremento del 17% en el riesgo de desarrollar esta enfermedad, pero también se ha constatado que sustituir estos alimentos por otros menos procesados, puede reducir ese riesgo.

La diabetes tipo 2 es una condición crónica en la que el cuerpo no utiliza adecuadamente la insulina, una hormona clave en el control de los niveles de azúcar en sangre. Esto provoca que la glucosa se acumule en el torrente sanguíneo, pudiendo derivar en complicaciones serias para la salud si no se trata. La relación entre la dieta y la diabetes tipo 2 ha sido desde hace años objeto de numerosos estudios, pero este estudio en particular destaca por su enfoque en los diferentes niveles de procesamiento de los alimentos.

Recordemos que los alimentos ultraprocesados son aquellos que han pasado por múltiples etapas de industrialización, contienen ingredientes que normalmente no se utilizarían en la cocina doméstica, sean conservantes, colorantes, saborizantes y otros aditivos. Ejemplos de este tipo de alimentos incluyen los snacks salados, las carnes procesadas, las bebidas azucaradas o las comidas preparadas, entre otros, y la mayoría de estos productos tienen un alto contenido en calorías, grasas saturadas, azúcares y sal, por lo que casi inevitablemente contribuyen a desarrollar diferentes problemas de salud.

En esta nueva investigación, los expertos utilizaron la clasificación Nova, sistema que clasifica los alimentos en cuatro grupos según su grado de procesamiento; Grupo 1: Alimentos no procesados, Grupo 2: Alimentos mínimamente procesados, Grupo 3: alimentos procesados, y Grupo 4: alimentos ultraprocesados. Se analizó la dieta de los participantes del estudio EPIC, en el que se investiga la relación entre el estilo de vida y enfermedades crónicas en toda Europa.

El estudio ha revelado que algunos tipos de alimentos ultraprocesados son particularmente perjudiciales para la salud, y entre los más peligrosos se destacan los snacks salados, las carnes procesadas, las comidas preparadas y las bebidas endulzadas, tanto azucaradas como con edulcorantes artificiales. Cuando se consumen estos alimentos en grandes cantidades, aumentan significativamente el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, de hecho y según los datos del estudio, las bebidas azucaradas suponían casi el 40% del consumo de productos ultraprocesados en los grupos de personas de mayor riesgo, lo que indica la importancia de prestar atención a este tipo de bebidas y de reducir su consumo al mínimo.

Los investigadores apuntan que no todos los alimentos ultraprocesados parecen tener el mismo nivel de riesgo, por ejemplo, el pan, los cereales para el desayuno y las alternativas basadas en plantas, se asociaron con una menor incidencia de diabetes tipo 2. Según la investigación antes citada, los productos 100% vegetales creados como alternativa a la carne y que se consideran ultraprocesados, no se relacionan con la multimorbilidad. El caso es que se sugiere que algunos alimentos, a pesar de su alto grado de procesamiento, podrían ser menos perjudiciales e incluso beneficiosos si se consumen de manera equilibrada. En este sentido y como información complementaria, es recomendable leer el post ¿Cuándo tomar cereales de desayuno? Recomendaciones para un consumo moderado.

De todos modos, la opción más lógica es sustituir alimentos ultraprocesados por opciones más saludables, y en este sentido, una de las conclusiones destacadas en el estudio es que si se sustituye un 10% de alimentos ultraprocesados en la dieta por alimentos mínimamente procesados o procesados, se puede reducir el riesgo de diabetes tipo 2. Según los datos, la sustitución de ultraprocesados por alimentos mínimamente procesados como frutas, verduras y productos frescos redujo el riesgo en un 14%, mientras que sustituirlos por alimentos procesados como el pescado enlatado o el queso, redujo el riesgo en un 18%.

Aunque no se ha demostrado causalidad, los investigadores barajan posibles causas de la relación entre los alimentos ultraprocesados y la diabetes tipo 2, como el exceso de calorías, el aumento de peso y la mala calidad nutricional de los ultraprocesados que desempeñan un papel clave. Las recomendaciones dietéticas deben ser más específicas y no agrupar a todos los alimentos ultraprocesados en la misma categoría, ya que como se ha comentado, no todos los ultraprocesados son iguales.

Esta investigación refuerza la idea de que, aunque los alimentos ultraprocesados son convenientes y ampliamente accesibles, es necesario reducir su consumo y sustituirlos por opciones más saludables, ya que puede tener un impacto significativo en la prevención de la diabetes tipo 2 y de otras enfermedades como el cáncer o los problemas de salud física y mental, entre otros.

Podéis conocer todos los detalles de la investigación a través de este artículo publicado en la página del Imperial College de Londres, y con más detalle en este otro artículo publicado en la revista científica The Lancet Regional Health – Europe.

Artículos relacionados