A menudo elaboramos recetas que necesitan gelatina para mantener una estabilidad en su textura, ya conocemos sus características y cualidades, recordad que os lo explicábamos en el post Hojas de gelatina, aunque también hay otros tipos de gelificantes que podemos utilizar en la cocina, como el agar agar. Pero centrándonos en las hojas de gelatina y en uno de los pasos previos que hay que realizar en cualquier receta en la que se utilizan, vamos a ver más que un truco, un consejo de cocina para que no se funda la gelatina en el remojo.
Puede haberos sucedido en alguna ocasión, un despiste, una elevada temperatura del agua del remojo o un tiempo prolongado de éste, puede haber provocado que las hojas de gelatina se fundan durante su hidratación, principalmente en verano, cuando la temperatura ambiente es elevada.
En invierno puede que no sea necesario tener en cuenta el consejo que os explicamos a continuación, aunque todo dependerá de la temperatura a la que se tenga la cocina si se enciende la calefacción o simplemente porque al encender el horno y cocinar, la temperatura ambiente también sube. Aunque en principio las hojas de gelatina se funden a unos 37º C, más vale prevenir.
Las hojas de gelatina o cola de pescado debe ponerse en remojo antes de incorporarla a la receta para que se disuelva de forma homogénea y cumpla con su función, siempre hay que ponerla en remojo en agua fría, así se hidrata, y no necesita más de cinco minutos. Puede darse el caso de que nos despistemos haciendo otras cosas y la temperatura del agua suba, así que para evitarlo, hay dos caminos, añadir unos cubitos de hielo al agua del remojo o poner el recipiente con agua fría y gelatina en el frigorífico.
Así de sencillo es evitar que se funda la gelatina durante el remojo. Y ya que estamos con este producto, ¿recordáis el truco para desmoldar gelatina?.