Hay dos métodos básicos para fundir chocolate, son los que utilizamos tanto los reposteros profesionales como los aficionados, uno es al baño maría y otro es en el microondas. Cada uno elige el que le resulta más cómodo y práctico, o el que le da más seguridad de que el resultado sea el esperado, y este es el baño maría, pues es un método de cocción indirecto, muy suave, y difícilmente va a estropear el producto.
Mientras que para fundir el chocolate en el microondas hay que estar muy pendiente y tener mucho cuidado, pues es muy fácil que el chocolate se queme si se excede el tiempo que se somete a su calor, a su potencia, etc. Para fundir chocolate al baño maría se suele utiliza un cazo específico o un bol que se introduce en un cazo con agua. Quien no conozca este sistema, puede leer este post.
Pues bien, hoy os vamos a mostrar un truco de cocina para fundir el chocolate con un sistema muy práctico y limpio, y con la seguridad que da el baño maría. Ahora bien, hay que decir que este método es ideal cuando el chocolate se va a utilizar para decorar con la manga pastelera, y es que se introducirá en este accesorio de repostería para fundirlo.
De este modo no se ensuciarán cacharros de cocina, bastará con una olla llena de agua y la propia manga pastelera que soporte temperaturas medias-altas, no hace falta llevar el agua a más de 50º C. Además de ser un sistema muy limpio, es también muy rápido, pues se puede tener el chocolate fundido y listo para usar en menos de 10 minutos.
Hay que tener en cuenta que el chocolate que se vaya a fundir esté en trozos más o menos iguales, pueden utilizarse gotas o pastillas (pistoles), o una tableta que se pique a cuchillo teniendo eso en cuenta, que los trozos sean similares en tamaño. Para fundir chocolate en la manga pastelera, el procedimiento es así de simple:
Llenamos una olla con agua caliente del grifo (así se gana tiempo, pero si no se pudiera, se calienta en el fogón y listo), y la ponemos al fuego a temperatura baja para que mantenga el calor. Introducimos el chocolate picado o porcionado en la manga pastelera y la cerramos con una pinza. Una manga pastelera de plástico de uso profesional tiene calidad suficiente para soportar el baño en agua caliente.
Entonces introducimos la manga en el cazo haciendo que quede bien sumergida, y se deja hasta que se funda. Se puede favorecer y acelerar el proceso dándole unas vueltas a la manga, presionándola para ver cuánto chocolate queda para fundir… si la temperatura del agua ronda los 40º C, se puede tocar y no quema, pero sí funde el chocolate. En cinco minutos el chocolate puede estar fundido, y la cocina limpia.
El chocolate está listo para decorar o rellenar galletas, tartas y pasteles, postres y lo que se desee. ¿Qué os parece? Esperamos que os resulte útil.