Cuando hacemos verduras y hortalizas en un medio de cocción húmedo, posteriormente es fácil que se apaguen y se arruguen, su aspecto es menos apetecible aunque en muchos casos se considera algo normal. La cocina y los gustos culinarios han cambiado, se ha pasado de comer la verdura blanda y pasada, a buscar una textura tersa, incluso crujiente, estamos seguros que con ello, la verdura ha ganado muchos puntos para muchas personas, porque además de ganar a la vista, gana en sabor y en propiedades nutricionales.
Que la comida tenga buen aspecto es muy importante, y si hablamos de verduras y hortalizas son varios los puntos a tener en cuenta a la hora de cocinarlas para sacarles lo mejor que pueden ofrecer, hoy queremos compartir un sencillo truco de cocina para evitar que las verduras se arruguen después hervirlas o hacerlas al vapor.
Esto nos sirve para distintos tipos de verduras y hortalizas, judías verdes, zanahorias, espárragos… pueden gustar más o menos hechas, más blandas o más crujientes, como comentábamos anteriormente, veremos en breve por qué algunas verduras pierden color y cómo podemos evitarlo, pero ahora lo que pretendemos es evitar que la superficie de las verduras se arrugue y es tan sencillo como añadirles un poco de aceite de oliva.
Particularmente apostamos por el aceite de oliva virgen extra, pero sirve también otro ingrediente graso como la mantequilla u otros aceites. Cuando las verduras se acaban de cocinar, evidentemente están calientes y este calor produce la evaporación del agua que contienen, pierden humedad y la superficie se arruga.
Al añadir un poco de aceite de oliva (no hace falta que sea excesivo, sólo que recubra la superficie de las verduras) se forma una película y dejan de perder humedad, presentándose brillantes y lisas. Esto debe realizarse justo al retirarlas del fuego, estando bien escurridas. Añadir un poco de grasa no variará el sabor final del plato si se utiliza un aceite suave, aunque en la mayoría de casos se aderezarán también con aceite, con alguna vinagreta o salsa, pero las verduras llegarán a la mesa con un mejor aspecto, algo que agradece cualquier comensal.
Foto | Ccharmon