Mintel, la compañía de investigación y análisis del mercado, marketing y publicidad, durante el desarrollo de la feria Food Ingredients Europe 2019 celebrada en París, dio a conocer el informe Tendencias globales del sector de la alimentación y las bebidas 2030 (Food & Drink Trends 2030). En este documento se señalan algunas tendencias y subtendencias clave que darán forma a la industria de la alimentación y las bebidas en los próximos 10 años.
Según Mintel, en el año 2030 los consumidores valorarán especialmente a aquellas empresas que lleven a cabo esfuerzos por preservar y mejorar el medio ambiente, pero también a aquellas empresas que realicen prácticas comerciales éticas, que se preocupen por la salud pública, así como por otras causas importantes. La consultora asegura que los consumidores recompensarán a aquellas marcas que actúen contra importantes problemas sociales, triunfando aquellas que impulsen una nueva era del consumo consciente.
Las tres tendencias principales identificadas son “seguir un enfoque activista”, los consumidores recurrirán a las empresas para que sean las principales fuerzas para el cambio en cuestiones sociales importantes, las “dietas inteligentes” donde la tecnología permitirá a los consumidores construir enfoques muy individualizados en temas de salud física y mental, y las “cosechas de alta tecnología”, Mintel asegura que la confianza del consumidor en la ciencia y tecnología alimentaria se fortalecerá a medida que se convierten en herramientas vitales para salvar nuestro suministro alimentario.
La información sobre estas tendencias es de gran valor para las empresas, ya que les ayudarán a prepararse para participar y prosperar de forma paralela a la evolución del comportamiento y actitudes de los consumidores en la próxima década. Los analistas de Mintel comentan que les ha inspirado el rápido ritmo de cambio que se ha ido produciendo a medida que nos acercábamos a la nueva década, considerando aquellos posibles cambios en base a las necesidades de los consumidores, cuyos elementos motivadores son el bienestar, el entorno, la tecnología, los derechos, el valor, la identidad y las experiencias.
Los analistas de Mintel predicen que las dietas inteligentes se extenderán a medida que crece la población y se limitan los recursos en la Tierra, se le dará un gran peso al impacto ambiental de las dietas. Los consumidores personalizarán sus dietas gracias a la capacidad de poder obtener un conocimiento profundo sobre lo que beneficia a su salud física y psíquica. Dados los pronósticos sobre el aumento de la obesidad para el año 2030, los edulcorantes vegetales no calóricos como la Stevia pueden ser una solución, siempre y cuando las grandes compañías trabajen para mejorar su perfil de sabor, ya que a pesar de un crecimiento inicial, a día de hoy no termina de gustar y por ello no tiene el uso y aplicaciones que debería tener.
Se cree que los envases comestibles compostables (aquellos que se degradan sin generar residuos para convertirse en abono) serán mucho más habituales. Los consumidores buscarán innovaciones que faciliten el reciclaje, la reutilización, la recarga o incluso el consumo de estos envases. Mintel apunta que hasta el año 2030, quienes estén preocupados por la salud del planeta, probablemente reducirán el consumo de alimentos de origen animal, apostando, sobre todo, por alimentos con un alto estándar ético y ambiental, siempre que sea posible. Sobre los productos de origen animal, la tendencia augurada es que el consumo será menor pero de mejor calidad, el alimento que se proporcionará a los animales productores de alimentos también será de mejor calidad.
La tecnología permitirá aumentar la individualización de las dietas a un nivel superior, cita el auge de las impresoras 3D para preparar comidas personalizadas, los electrodomésticos de cocina inteligentes que pueden proporcionar recetas de cocina y listas de compra personalizadas, las soluciones innovadoras que les proporcionen recomendaciones de sabores, nutrientes específicos o ingredientes funcionales, etc.
Los analistas comentan que las empresas alimentarias brindarán orientación nutricional en base a sus necesidades y les facilitarán la compra de productos específicos. Recuerda que en la actualidad, algunos altavoces inteligentes como el de XiaoAi de Nestlé China, ya actúan como asistentes en la nutrición familiar, augurando que será una tendencia que predominará con el paso de los años. También hay empresas que proporcionan recomendaciones basadas en datos nutricionales, como Nestlé Japón, que recomienda cápsulas de café y batidos en base a este tipo de datos, esta es una tendencia que se extenderá y será adoptada por la industria alimentaria.
Se producirá una nueva revolución agrícola que nada tendrá que ver con la revolución verde, esta es una consecuencia lógica teniendo en cuenta que las áreas y modelos agrícolas tradicionales están siendo desafiados por un clima extremo e impredecible. Por ello, se establecerán granjas con nuevos modelos productivos, se apostará por la agricultura vertical y especialmente por las micro granjas verticales y locales, que suministrarán una gran cantidad de alimentos frescos a nivel local. Destacarán zonas donde se desarrollarán innovaciones agrícolas capaces de abordar el problema de la seguridad alimentaria, por ejemplo, en el África subsahariana o la India.
Los ingredientes sintéticos, como la vainilla biosintética, el aceite de palma sintético o el alcohol sintético, adquirirán gran relevancia. La cadena de suministros alimentarios y la ciencia se entrelazarán para aumentar el rendimiento a la vez que se combate el cambio climático, se cree que se agradecerán los beneficios sostenibles, sanitarios y económicos de los denominados alimentos cultivados, siendo cruciales para educar a los consumidores sobre alternativas idénticas a las que proporciona la naturaleza, pero sin la carga medioambiental asociada.
Irremediablemente Mintel comenta que la industria de alimentos y bebidas se verá obligada a elevar el papel de la naturaleza y los seres humanos en la narrativa de estas nuevas y modernas soluciones. Pero la transparencia de la información será esencial para generar confianza en un futuro donde los investigadores jugarán un papel tan importante como el que juegan los agricultores y productores de alimentos. Estos son algunos de los datos que se pueden extraer del informe Food & Drink Trends 2030, pero hay mucho más, por ello os recomendamos acceder al documento, leerlo y sacar vuestras conclusiones.