Este fin de semana tenemos compromisos de los que nos encantan, comidas y cenas con amigos y con familia, y ya sabemos lo que eso representa, comer más de lo habitual, por lo que se agradece que los postres sean ligeros, suaves, refrescantes… por eso hemos preparado nuestra Tarta de yogur griego, que es como una tarta de queso pero además de fresca y deliciosa, es ligera. También nos da mucho juego a la hora de servirla, pues con el yogur van bien las frutas frescas, las mermeladas, los frutos secos, el chocolate…
Para hacer esta sencilla tarta de yogur sólo se necesitan cuatro ingredientes, siendo el principal requisito elegir un buen yogur griego. Después hacen falta huevos, un poco de almidón de maíz y el endulzante deseado, en la receta os indicamos la cantidad de azúcar necesaria, pero si queréis hacer una tarta más saludable, podéis utilizar un endulzante natural como el sirope de dátiles, por ejemplo. El sabor cambiará, pero veréis que también queda muy rico. Por cierto, si queréis dar un toque cítrico a esta tarta de yogur griego, también podéis añadir piel de lima o de limón rallada de forma generosa, como en esta tarta de queso fresco.
Ingredientes (Molde 18 cm.)
- 500 gramos de un buen yogur griego
- 3 huevos L
- 40 gramos de Maizena
- 150 gramos de azúcar (o el equivalente en otro endulzante saludable)
- c/n de mantequilla para el molde.
Elaboración
Puedes hacer esta masa batida con una batidora manual de varillas, con un robot de cocina o batidora eléctrica de mano. En primer lugar pon en el recipiente correspondiente todo el yogur griego, elige el de mejor calidad y mayor cremosidad (hay muchos yogures griegos que no lo son en realidad).
Añade los tres huevos, uno a uno, cascándolos y dejándolos caer en un pequeño cuenco o taza, así, si uno saliera malo (cosa que no suele pasar), no habría que tirar todo lo demás.
Incorpora a continuación el almidón de maíz (Maizena) y el azúcar, y si deseas hacer una tarta más saludable, sin azúcar, sustitúyelo por el edulcorante que utilices, también sale bien.
Bate hasta conseguir una masa fina, homogénea y cremosa, teniendo en cuenta que no conviene excederse en el batido para que no se generen muchas burbujas de aire, que quedarían después en la tarta.
Tapa el recipiente y deja reposar en el frigorífico mientras se calienta el horno con calor arriba y abajo a 175º C. Prepara el molde untándolo con la mantequilla, y después vierte la masa. Ten en cuenta que al hornearse la tarta subirá (y después bajará), por lo que debe ser un molde alto.
Introduce el molde en el horno caliente y hornea durante 40 minutos, para comprobar que ha cuajado, haz la prueba del palillo, si sale limpio al pinchar en el centro, la tarta de yogur está lista.
Deja enfriar la tarta a temperatura ambiente y después introdúcela en el frigorífico bien tapada, al menos un par de horas para que repose.
Acabado y presentación
Recuerda tener la tarta a temperatura ambiente un rato antes de servirla para poder disfrutar de su textura y de su sabor. Desmolda la tarta de yogur griego y sírvela decorada con frutas frescas, chocolate negro picado a cuchillo, sirope de chocolate, helado, manteca de cacahuete, avellanas o almendra… o con algo tan clásico como la mermelada. ¡Buen provecho!
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria