Tarta de hojaldre con champiñones, tomates secos y ricota salada, una receta fácil para celebrar

Hace unos días encontramos ricota salada en el supermercado, hacía bastante tiempo que no la comprábamos y nos encanta para hacer tartas de hojaldre, quiches, pizzas, tostadas… Hoy hemos hecho una tarta salada que es muy sencilla, pero estamos seguros de que os va a encantar como a nosotros en cuanto la probéis, ilustrando estas líneas podéis ver nuestra Tarta de hojaldre con champiñones, tomates secos y ricota salada, una receta fácil para celebrar que hoy es hoy (y esto sirve para el momento en el que lo estás leyendo).

Elegid un buen hojaldre fresco, puede ser redondo o rectangular, haceos con unos buenos champiñones de París, de los que son macizos por dentro, no hace falta que sean muy grandes. Los tomates secos en aceite de oliva virgen extra aportan mucho sabor, y si son carnosos como los de Corazón de buey mejor que mejor. La ricota salada la podéis encontrar en tiendas especializadas en queso (y en ocasiones, en semanas especiales de Lidl), pero si no la tenéis, podéis hacer esta tarta de hojaldre con un buen queso fresco de oveja, es la alternativa que solemos utilizar nosotros, también queda bien con queso feta.

Ingredientes (4 comensales)

  • 500 gramos de champiñones
  • c/n de sal
  • c/n de pimienta negra recién molida
  • c/n de aceite de oliva virgen extra
  • 1 masa de hojaldre fresco
  • 1 huevo
  • 16 tomates Corazón de buey secos en aceite (El Rebost L'Antic Moli)
  • 150 gramos de ricota salada
  • 50 gramos de queso Tête de Moine
  • cebollino fresco.

Elaboración

Limpia los champiñones y córtalos en láminas, pon a calentar una sartén con un chorrito de aceite de oliva virgen extra y añade los champiñones, salpimenta al gusto y cocina las setas a fuego fuerte unos cinco minutos, salteándolos para que se hagan de forma homogénea.

Casi al final, añade los tomates secos en aceite, enteros o troceados, como prefieras. Opcionalmente también puedes añadir un diente de ajo picado para saltear los champiñones. Después, déjalos enfriar en un plato.

Enciende el horno a 220º C con calor arriba y abajo. Saca la masa de hojaldre fresco de la nevera y córtala en dos para hacer dos tartas alargadas (si prefieres hacer el hojaldre entero, puedes hacerlo). Pincha la superficie de la masa varias veces con un tenedor, sin llegar a los bordes para que suban durante el horneado.

Pinta el hojaldre con huevo batido y reparte los champiñones con tomates secos. Desmiga la ricota salada y repártela también sobre el hojaldre. Dispón el queso Tête de Moine en rosetas sobre la ricota y finalmente añade los piñones.

Introduce la bandeja en el horno a altura media, baja la temperatura a 200º C y hornea el hojaldre unos 12-15 minutos o hasta que la masa esté dorada por los bordes. Entonces, retira del horno y deja enfriar sobre una rejilla.

Acabado y presentación

Presenta la tarta de hojaldre con champiñones y ricota salada en una bandeja, añade el cebollino fresco picado y córtala en porciones para repartir entre los comensales, la van a disfrutar. ¡Buen provecho!

Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria

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