La tabla para cortar el pan nos parece un utensilio que no sólo es indispensable, sino que tiene también cierto ‘romanticismo’, sobre todo cuando se hace pan casero (o eso nos parece), este hecho implica que cuidemos todo lo que tiene relación con el pan, desde los paños que utilizamos para la fermentación de la masa, hasta la panera, el cuchillo o la tabla, queremos cortar el pan cómodamente y si además el pan se posa en un elemento elegante y práctico como esta tabla para cortar pan con recogemigas, pues mejor, ¿verdad?
Nosotros tenemos una tabla para el pan similar a la de la foto superior, en lugar de un cajón es como una bandeja de madera sobre la que se encajan los listones que permiten que caigan las migas al recipiente inferior. Es de buen tamaño, como esta, que tiene unas medidas de 40 x 24 x 4’5 centímetros.
Hacía unas semanas que estábamos buscando una tabla de cortar de este estilo, es para hacer un regalo, y esta puede ser una opción. Poco hay que explicar sobre esta tabla de cortar para pan que no quede desvelado al ver la foto. Gracias a su diseño, cuando cortemos pan no se escamparán las migas por la encimera, incluso se podrán recuperar (si es que cuando se hace buen pan no se quieren tirar ni las migas). El cajón servirá además para guardar el cuchillo del pan y tenerlo siempre a mano cuando se tenga que utilizar.
Es posible que encontréis modelos similares a esta tabla en vuestra tienda de menaje de cocina habitual, pero si no es el caso o simplemente os ha gustado este, decir que está hecho en exclusiva para Lakeland (distribuyen a España) y su precio al cambio ronda los 26 euros.
Es un utensilio duradero, por poco que se cuide, se amortizará bien.