Ya conocéis la salsa hoisin, la denominada salsa barbacoa china, pues es un aderezo muy utilizado en la cocina china como en otros países se utiliza la salsa barbacoa que todos conocemos, marinando o salseando asados o carnes a la parrilla por ejemplo. La receta de hoy es el Solomillo con salsa hoisin, con zanahorias ahumadas y cebollitas francesas, un plato ideal para disfrutar el fin de semana, además es muy fácil y rápido de hacer.
La receta de solomillo con salsa hoisin es un plato principal que seducirá a los paladares más exigentes, el/la cocinero/a se sentirá afortunado porque esta sencilla elaboración puede provocar los elogios de todos los comensales. Es importante que las materias primas sean buenas, controlar los tiempos de cocción y tener ganas de disfrutar de la comida, con esto, el éxito está asegurado.
Ingredientes (4 comensales)
- 1 solomillo de cerdo (de unos 800 gramos)
- 8 cebollitas francesas
- 8 zanahorias pequeñas
- 8-10 c/s de salsa hoisin
- pimienta negra recién molida
- sal ahumada
- sal
- aceite de oliva virgen extra
- un poco de agua.
Elaboración
Pela las cebollitas y las zanahorias, éstas córtalas por la mitad. Pon una sartén al fuego con un poco de aceite de oliva a temperatura media, incorpora las cebollas y dóralas un poco dándoles la vuelta, desprenderán algo de sabor y empezarán a caramelizar, añade un par de cucharadas de agua y tapa la sartén, deja que se hagan las cebollas unos minutos más para que al finalizar la cocción estén tiernas.
Cuando el agua se haya evaporado, incorpora las zanahorias y sala al gusto, con la sal ahumada y la sal normal. Sube el fuego para que las zanahorias se tuesten ligeramente pero ofrezcan una textura entre tierna y crocante, ve dándoles la vuelta para que se hagan uniformemente y antes de finalizar, añade la pimienta recién molida.
En otra sartén o parrilla haz el solomillo, sálalo al gusto y márcalo, añadiendo aceite de oliva virgen extra (lo justo para lubricar, no para freír), primero a fuego fuerte para que se dore por fuera en todo su contorno, y después reduce el fuego para que el calor llegue al interior de la carne, cocinándolo pero dejándolo jugoso. El tiempo dependerá del grosor del solomillo.
Cinco minutos antes de que esté hecho, añade la salsa hoisin y rebaja con un poco de agua, permitiendo así que el solomillo tome el sabor de la salsa y ésta no se queme, al final conseguirás un glaseado brillante y muy sabroso.
Emplatado
Corta el solomillo en cuatro raciones y sírvelo en los platos. Acompáñalo de las zanahorias y las cebollitas francesas. Reparte la salsa hoisin dejándola caer sobre el solomillo y sirve enseguida. ¡Buen provecho!
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria