En cuanto los probéis nos daréis la razón, estos scones dulces de limón son unos panecillos tiernos, crujientes e irresistibles, por lo que será fácil que se conviertan en una de vuestras recetas imprescindibles para preparar cuando tengáis visita y, sobre todo, para hacerlos el fin de semana para vosotros y vuestra familia, son una delicia para desayunar, para merendar, para tomar con el café… Y se pueden tomar solos, no necesitan nada más para conquistar a los paladares más exigentes, pero también se pueden acompañar de mantequilla y mermelada, de crema o manteca de frutos secos como la almendra, la avellana, el cacahuete (leguminosa), de algún queso cremoso…
Para quien no conozca qué son los scones, se trata de unos panecillos originarios de Escocia y tradicionalmente consumidos en Gran Bretaña con el té, aunque en la actualidad se toman a cualquier hora del día. Es un pan rápido que se elabora con levadura química, por lo que están entre un bollito y una galleta. Hay mil y una formas de elaborar estos panecillos, os recomendamos leer este post para saber más, y que toméis nota de esta receta de nuestros deliciosos scones de limón, porque os van a encantar.
Los hemos hecho con harina de espelta integral, porque tiene muy buen sabor y es nutritiva, pero podéis utilizar la harina que más os guste. El glaseado de limón ya sabéis que es puro azúcar, pero le da un toque riquísimo, y como no es para comerlos a diario… no obstante, podéis hacer los scones de limón sin el glaseado para reducir el contenido de azúcar, seguirá siendo un gustazo comerlos. Ahora bien, lo que es la masa no queda demasiado dulce, veréis que lleva poco azúcar, es la glasa de limón la que le aporta más dulzor, de todas formas quedan muy ricos.
Ingredientes (8 uds)
- 180 gramos de harina de espelta integral
- 1 c/c de levadura de repostería
- 20 gramos de azúcar de abedul (u otro endulzante al gusto)
- una pizca de sal
- 40 gramos de mantequilla
- 15 gramos de zumo de limón
- piel rallada de medio limón
- 90 gramos de leche.
Para el glaseado
- 60 gramos de azúcar glas
- 1 c/s aprox. de zumo de limón natural.
Elaboración
Mezcla en un bol los ingredientes secos, la harina (que como hemos comentado, puede ser otra variedad, integral o blanca), la levadura de repostería, el azúcar y la pizca de sal.
Corta la mantequilla en dados y añádela al bol, empieza a trabajar los ingredientes con las manos, mezclando hasta obtener una especie de migas. A continuación añade la piel y el zumo de limón, y la leche, vuelve a mezclar.
Haz una bola con la masa y extiéndela sobre la mesa de trabajo enharinada o sobre un Silpat, puedes darle forma redonda y un grosor de unos dos centímetros. Corta la masa en ocho porciones y sepáralas un poco.
Dispón los scones en la bandeja del horno cubierta con una tela de cocción (Silpat, teflón, papel vegetal…), e introdúcela en el horno precalentado a 200º C con calor arriba y abajo. Hornea los scones durante 15-20 minutos, el tiempo puede variar según el horno, el grosor de la masa…
Cuando estén ligeramente dorados y algo crujiente por fuera, los puedes retirar, al enfriarse se pondrán más crujientes.
Prepara el glaseado mezclando el azúcar con el zumo de limón, hasta obtener una especie de crema blanquecina. Con ayuda de una cuchara, vierte un hilo de glaseado sobre los scones de limón y deja que se seque.
Acabado y presentación
Los scones de limón estarán listos para servir en el desayuno, con el café en la sobremesa, a media tarde… cualquiera puede ser un buen momento para disfrutar de estos bollitos de pan con un delicioso toque cítrico y una textura espléndida. ¡Buen provecho!
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria