Los scones son unos panecillos muy fáciles y rápidos de hacer, al estilo de unas galletas, son originarios de Escocia y son ideales para tomar como desayuno, aperitivo, merienda… los hay dulces y salados, ya os hemos mostrado varias recetas de scones, y hoy compartimos con vosotros una de nuestras preferidas, la receta de Scones de queso y nueces.
Si queréis conocer algo más sobre la historia o tradición de consumo de estos panecillos, podéis leer el post Scones, y ver otras recetas como los Scones de aceitunas y alcaparras, los Scones de aceite de oliva, los Scones integrales de higos y queso fresco… estos panecillos crujientes por fuera y tiernos por dentro abren una gran puerta a la imaginación y la creatividad, pero si no los habéis probado aún, empezad con estos Scones de queso y nueces que os encantará repetir.
Ingredientes (9 uds.)
- 120 gramos de harina panificable (180 W)
- 7 gramos de levadura de repostería
- 60 gramos de queso emmental rallado
- 45 gramos de nueces peladas
- 130 gramos de leche de cabra
- 5 gramos de sal
- 5 gramos de azúcar
- pimienta de Jamaica recién molida.
Elaboración
Pon en un cuenco la harina (la W marca la fuerza de la masa, esto no se especifica en los paquetes de harina comerciales que encontramos habitualmente, es harina que compramos en la panadería, algo más floja que la harina de fuerza) con la levadura tamizada, añade el queso rallado, las nueces picadas en trozos pequeñitos, el azúcar, la sal, la pimienta de Jamaica y mezcla bien.
A continuación añade la leche y vuelve a mezclar hasta que se integre bien con todos los ingredientes, obteniendo una pasta pegajosa. Cubre el cuenco con film transparente y deja reposar en el frigorífico unos 20 o 30 minutos.
Prepara la bandeja del horno cubriéndola con teflón o papel vegetal, precalienta el horno a 200º C. Coge una cuchara para galletas o la cuchara para helados y llénala con la masa de los scones, deja caer en la bandeja.
Según el tamaño de la cuchara saldrán más o menos galletas, nosotros hacemos nueve scones como indicamos en los ingredientes. Cuando el horno esté a la temperatura indicada y hayas dado forma a los scones, introduce la bandeja y hornea durante 20 minutos, o hasta que los scones de queso y nueces estén ligeramente dorados y crujientes.
Los scones se pueden tomar recién hechos o una vez reposados y fríos. Si los vas a dejar enfriar recuerda posarlos sobre una rejilla para que la base de los Scones se mantenga caliente.