Ahora Santi Santamaria dirige el Restaurante Bouquet ubicado en el Hotel Hesperia Tower de L’Hospitalet (Barcelona). Este restaurante fue inaugurado en 2006, cuando se inauguró el hotel y el Restaurante Evo que se encuentra en el mismo edificio y que dirige el chef catalán desde sus inicios logrando para él una estrella Michelin.
El Restaurante Bouquet empezó con un concepto gastronómico basado en la cocina enológica, lo que implicaba que el vino estaría presente en la elaboración de los platos creados por el anterior chef ejecutivo, Paulo Coronho Alves. Pero ahora que Santi Santamaria dirige el Restaurante Bouquet, la carta estará basada en la cocina tradicional, aunque no dejará muy de lado la vertiente enológica.
El defensor de la cocina ‘natural’ y casera en los restaurantes, cuenta también con el chef del Evo, Ismael Alegría, en este nuevo proyecto del Restaurante Bouquet. Cabe destacar que esta nueva etapa provoca cambios que afectan al Restaurante Evo, pues ya no abrirá a mediodía, su oferta se ceñirá a las cenas. Uno de los motivos es el descenso de la clientela en los últimos meses.
Por eso, el Restaurante Bouquet ofrecerá a mediodía un menú adaptado a la crítica época económica en la que nos encontramos, más pensada en las comidas de negocios que en el turismo, sobre todo por el enclave del local.
Santi Santamaria, que en su colaboración con Hesperia también está al frente del Restaurante Santceloni del Hotel Hesperia de Madrid, quiere ofrecer un espacio en el que cualquiera pueda disfrutar comiendo a diario, con producto fresco, de temporada, de proximidad y de bajo coste, cuidando la parte nutricional de cada plato además del sabor y la estética, una completa apuesta por la dieta mediterránea.
El Restaurante Bouquet ofrecerá por lo tanto, un menú a 25 euros sin bebida y sin Iva, además de la comida a la carta a un precio medio de 39 euros. Está claro que con los productos más económicos se pueden hacer grandes manjares, las sardinas, el pollo o las legumbres bien cocinadas, no encarecen los platos pero enriquecen el paladar.
Creemos que estos cambios son una buena jugada de Hesperia, la restauración está siendo muy tocada por la crisis y hay que actuar amoldándose a las necesidades del mercado.