El segmento de productos alimentarios elaborados con proteínas de insectos crece rápidamente, cada vez aparecen más empresas que los incluyen en su oferta, aunque hasta no hace mucho la producción se había centrado sobre todo en los productos de panadería, repostería o pasta. Ahora podemos encontrar productos como Critter Bitters, una variedad de bebidas elaboradas con grillos tostados, cuyo objetivo es introducirse en el mundo de los cócteles, hamburguesas elaboradas con proteínas de insectos, carne vegetal y carne animal, e incluso salsas elaboradas con insectos como grillos o gusanos de la harina, creadas por C-Fu FOODS. Esta empresa se dedica a la elaboración de productos de alimentación con proteína obtenida de insectos, pero con un carácter más agresivo e innovador.
Son dos variedades de salsa boloñesa concebidas para aderezar la pasta, y actualmente están sujetas a una campaña de crowdfunding en Indiegogo. Se trata de las primeras salsas de este tipo elaboradas con base de insectos comestibles en el mundo, según comenta la empresa, han desarrollado un nuevo proceso pendiente de patente que puede convertir los insectos en una proteína texturizada con un sabor parecido al de la carne de vacuno. Las salsas se promocionan ensalzando el sabor, pero sobre todo haciendo especial hincapié en los beneficios ambientales que ofrece la alimentación a partir de insectos.
Los insectos utilizan menos recursos, menos agua y tierra que la que se dedica a la producción animal o vegetal, producen menos residuos y además se pueden alimentar de residuos, producen menos emisiones de gases de efecto invernadero, los residuos que generasen podrían ser reciclados y utilizados como fertilizantes para los cultivos vegetales, etc. Los responsables de C-Fu FOODS comentan que su objetivo no es impedir que se coma carne, simplemente buscan ampliar horizontes culinarios en nombre de la sostenibilidad.
La salsa boloñesa con proteína de grillos se ha elaborado con salsa de tomate (tomates maduros, aceite de oliva virgen extra, aceite de girasol, cebolla, sal de ajo asado, ácido cítrico y albahaca), grillos de la especie tropical Gryllodes sigillatus, aceite de oliva virgen extra, cebolla, ajo, zanahoria, apio, sal, ácido cítrico, especias, cloruro de calcio, ácido ascórbico, y aceite de romero. La salsa boloñesa con proteína de gusanos de la harina tiene los mismos ingredientes, pero la proteína utilizada procede de los gusanos. Sus creadores comentan que han realizado catas a ciegas en ferias locales y mercados de agricultores obteniendo muy buenas críticas por la calidad de las salsas, sin embargo, están en una fase de inicio y necesitan respaldo económico, de ahí la campaña de crowdfunding.
Como sabemos, a los insectos se les atribuyen interesantes propiedades nutricionales y tienen un carácter respetuoso con el medio ambiente, sin embargo, son un alimento que mayoritariamente causa repugnancia en el mundo occidental, este es uno de los grandes obstáculos que se deben superar para lograr la introducción y aceptación de este alimento en la dieta de los países industrializados.
Algunas empresas que se dedican a este segmento de mercado consideran que para superar los problemas y las ideas preconcebidas sobre el hecho de comer insectos, es necesario acercarlos a los consumidores, que los prueben y puedan apreciar el sabor que ofrecen. Claro, que una estrategia importante es la transformación, como se come con los ojos, no es conveniente presentar unos grillos con su forma original, ya que pueden provocar el rechazo, de ahí que se presenten en otros formatos, un ejemplo son estas salsas.
La campaña solicita 25.000 dólares, y a falta de 16 días se han recaudado algo más de 5.000 dólares, de todos modos la salsa será una realidad y empezará a comercializarse, ya que la meta económica es flexible y la campaña recibirá todo el dinero recaudado aunque no alcancen el objetivo. C-Fu FOODS pretende aportar un nuevo enfoque con esta proteína procedente de una fuente sostenible, aseguran que con su proceso para la transformación de la proteína de insecto se pueden elaborar otros productos capaces de sorprender y conquistar el paladar de las personas.
Los hermanos Lee y Eli Cadesky, fundadores de C-Fu FOODS, explican que apuestan firmemente por esta alternativa alimentaria para satisfacer la creciente demanda de proteínas del mundo. Los insectos son una fuente alimentaria abundante, segura y respetuosa con el medio ambiente, con la que se pueden crear alimentos que se pueden considerar gourmet. Tienen la esperanza de poder crear una plataforma para los cocineros, para que puedan expresar su arte y pasión a través de la comida pero de una forma sostenible.
Sobre el tema de la seguridad, merece la pena retomar la lectura de este post, en el que hablamos sobre un informe elaborado por ANSES (Agencia Nacional de Seguridad Alimentaria francesa), tratando el inventario del conocimiento científico sobre los riesgos de salud relacionados con el consumo de insectos, en este informe se destacaba que era necesaria una revisión de la seguridad de los insectos comestibles en varios ámbitos. La agencia declaraba que se debe imponer el principio de precaución y conocer más datos sobre este tema antes de lanzarse a la producción, elaboración y venta de productos elaborados con proteínas de insectos para la alimentación humana.
Para conocer más detalles de la actividad de C-Fu FOODS y la presentación de las nuevas salsas elaboradas con insectos, podéis acceder a la página web de la empresa.