Salsa soubise: Mucho más que una simple bechamel

¿Quién no ha disfrutado de unos deliciosos canelones bañados en una cremosa salsa? Y si te digo que esa salsa puede elevar tus platos a otro nivel, ¿te animarías a probarla? Hoy vamos a desvelarte el secreto de nuestra salsa bechamel de herencia familiar y la llamamos salsa soubise, aunque hacemos una versión más suave de la tradicional salsa bechamel con cebolla.

Desde pequeños, los canelones con salsa bechamel son uno de nuestros platos favoritos. Y lo serán por siempre. Como curiosidad, os contaré que de pequeña estaba convencida de que mi madre hacía canelones con la clásica bechamel, luego descubrí que era bechamel con cebolla y más tarde aprendí que la bechamel enriquecida con cebolla se llama soubise. Claro, que tiene sus matices, pero para nosotros, la salsa soubise es mucho más que una simple bechamel.

Ese toque distintivo que aportan las cebollas, eleva la soubise a un nivel único. Su origen francés no hace más que añadirle un aura especial, aunque debo confesar que nuestra versión familiar no es exactamente la misma que dicta la receta clásica. Y es que la receta original francesa lleva una cantidad enorme de cebolla.

De hecho, según el diccionario Larousse Gastronomique, el término ‘soubise’ (pronunciado ‘subiss’), define a una serie de preparaciones que incluyen cebollas, ya sea en una salsa (bechamel a la que se añade puré de cebolla) o bien en un puré que se puede espesar con arroz cocido. Se podría decir que la protagonista de la salsa soubise es la cebolla y no la bechamel.

Basta con ver la receta de la salsa soubise del diccionario gastronómico francés para corroborarlo. Es más, os la transcribimos a continuación, los ingredientes y el procedimiento para elaborar una salsa soubise tradicional, tomad nota.

Receta tradicional de salsa soubise
Pelar y cortar finamente 1 kilo de cebollas blancas y sumergirlas en mucha agua salada. Llevar a ebullición, escurrir las cebollas y ponerlas en una cacerola con 100 gramos de mantequilla, sal, pimienta y una pizca de azúcar. Tapar y rehogar de 30 a 40 minutos, sin que coja color. Añadir a las cebollas la cuarta parte de su volumen de bechamel espesa. Mezclar bien y cocer durante 20 minutos más. Rectificar la sazón y pasar por el cedazo muy fino, agregar 75 gramos de mantequilla y 1 dl de nata.

Es interesante saber que la cocina francesa también contempla en su recetario el puré soubise, que se hace igual que la salsa, pero en lugar de bechamel se suele añadir arroz cocido en la misma proporción, y al final de la elaboración se añade también la mantequilla, pero no la nata.

En casa, como ya os hemos comentado, estamos más acostumbrados a nuestra versión más suave, con la cebolla más caramelizada que hecha puré, y aportando su dulzor a la salsa desde la elaboración de la roux, impregnando también desde el principio su sabor a la leche. Os vamos a enseñar en la próxima videoreceta cómo hacemos la salsa soubise en nuestra cocina, y próximamente también lo haremos con la soubise tradicional, ya nos contaréis cuál hacéis vosotros, o cuál os vais a animar a probar primero.

Aplicaciones culinarias de la salsa soubise

La salsa soubise, con su sabor suave y ligeramente dulce, es un acompañamiento versátil que puede elevar cualquier plato. Además de los clásicos canelones, aquí encontraréis algunas ideas para utilizarla y disfrutarla:

Carnes: La salsa soubise combina maravillosamente con carnes blancas como el pollo o el pavo, aportando un toque cremoso y sofisticado. También es deliciosa con carnes rojas asadas, como el solomillo o el entrecot.

Pescados: Para los amantes del pescado, la salsa soubise es una opción excelente para acompañar pescados blancos como el bacalao o la merluza. Su sabor suave realza los sabores delicados del pescado.

Verduras: Las verduras gratinadas con salsa soubise son una delicia. Probad a gratinar brócoli, coliflor o espinacas con esta salsa para obtener un plato reconfortante y lleno de sabor.

Croquetas: Tanto para hacer la masa de las croquetas, como para bañarlas con la salsa soubise antes de gratinarlas.

Tortillas: Es fantástico dar un toque especial a las tortillas salseándolas ligeramente con una cremosa soubise que también se puede aromatizar con algunas hierbas.

Sándwiches: La salsa soubise es un perfecto relleno de sándwiches calientes, junto con jamón, queso y champiñones, por ejemplo.

Sopa: Añadir un poco de salsa soubise a las sopas cremosas, les proporciona una cremosidad y un sabor más intenso y sofisticado.

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