Hoy hemos preparado esta salsa de yogur, ajo y bergamota que en su día ideamos para aderezar unas pechugas de pollo a la parrilla, pero después le vimos muchas otras aplicaciones en todo tipo de platos, desde ensaladas hasta sándwiches, sobre todo nos gusta en los bocadillos que hacemos con pan pita, que vienen a ser panes planos rellenos de ensalada con pollo, lomo o filetes de ternera cortados en tiras, otras veces con langostinos o con salmón ahumado…
Ya veis lo versátil que es esta salsa, y no os lo hemos dicho todo, porque también la hemos tomado con patatas gajo y con crudités. Y estamos seguros de que a vosotros se os van a ocurrir otras tantas recetas a las que esta salsa de yogur (o de queso fresco) con ajo y bergamota le va ir bien, y es que es un aderezo para (casi) todo, sabroso y ligero, y muy fácil de hacer, como todas nuestras recetas, esperamos que lo probéis y lo disfrutéis.
Ingredientes
- 100 gramos de yogur natural cremoso
- una pizca de sal
- ½ c/c de ajo en polvo
- 1 c/c de cebollino picado
- 1 c/p de levadura nutricional
- 1 c/s de aceite de oliva virgen extra
- 1 gota de aceite esencial de bergamota
- piel rallada de media lima
- pimienta negra recién molida.
Elaboración
Prepara esta salsa fría en un bol, en primer lugar, pon el yogur natural cremoso, puedes ser simplemente yogur, aunque es preferible un yogur espeso como el yogur griego, incluso se puede hacer con queso quark o queso fresco batido. Además, se puede elegir entre las versiones de yogur o de queso enteros o bajos en grasa.
Añade sal al gusto, ajo en polvo (puede ser casero, aquí tienes la receta), el cebollino fresco picado, la levadura nutricional y el aceite de oliva virgen extra. Para darle el toque cítrico, un tanto especial, utilizamos un poco de piel de lima y el aceite esencial de bergamota, hay que asegurarse al comprarlo que sea para uso alimentario.
Para terminar, añade la pimienta negra recién molida y mezcla bien, hasta emulsionar la salsa. Prueba y rectifica al gusto si necesitas poner un poco más de sal, dar más protagonismo al aceite de oliva virgen extra… Puede gustarte añadir una pizca de miel y/o de mostaza antigua.
Acabado y presentación
Esta salsa fría de yogur está lista para servir directamente en el plato para el que la has preparado o para llevarla a la mesa en una salsera y que cada comensal se sirva al gusto. Si sobra, puedes guardarla en el frigorífico en un tarro bien cerrado. ¡Buen provecho!
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria