La salsa de mostaza y miel es un aderezo muy popular en varios países, quizá al nuestro ha tardado un poco más en llegar pero lo ha hecho para quedarse y creemos que afortunadamente, al menos por el momento, es una salsa semi elaborada, es decir, realizamos la mezcla de mostaza y miel a nuestro gusto seleccionando las variedades de cada uno de estos ingredientes según nuestras preferencias, aunque seguramente ya está en las estanterías de supermercados e hipermercados la denominada Honey Mustard Sauce.
Utilizada como salsa o como dip para mojar crudités, patatas fritas, aros de cebolla, nuggets… e incluso para untar el pan antes de hacer un bocadillo o sándwich, la combinación del intenso sabor de la salsa de mostaza con la dulzura de la miel es una delicia, muy apropiada para cocinar distintos tipos de carnes, siendo quizá las más habituales la de cerdo y la de cordero.
La elaboración básica de la salsa de mostaza y miel es combinar a partes iguales los dos ingredientes, pero esto puede cambiar al gusto del consumidor, nosotros por ejemplo ponemos menor proporción de miel que de mostaza, nos gusta que predomine la mostaza y que la miel aporte su suavidad y dulzor. Conviene seleccionar una miel que no sea muy fuerte, por ejemplo la miel de azahar, de romero o de mil flores, y siempre, siempre que sea posible, que sea miel pura y miel nacional (recordemos el post ¿Nos la dan con miel de China?).
También podemos elegir entre la variedad de salsas de mostaza que más nos gustan, cómo no, os vamos a recomendar nuestra salsa de mostaza dulce para que la probéis en cuanto tengáis ocasión porque es una delicia, pero para elaborar la salsa de mostaza y miel podéis partir de una clásica salsa de mostaza. Nuestra elección suele ser la salsa de mostaza antigua o la salsa de mostaza al vino blanco, pero lo dicho, podéis elegir la que más os guste, sin las semillas de mostaza si queréis que resulte más fina.
Disponiendo de la miel y la salsa de mostaza, ya podemos elaborar esta sencilla salsa de mostaza y miel que es casi adictiva, cuando la probéis aderezando una ensalada de pollo, como por ejemplo la Ensalada César de pollo, seguro que repetiréis. Pero a estos dos ingredientes básicos se le pueden incorporar algunos aderezos o especias más según para lo que vayamos a emplearla.
Algunas propuestas para aromatizar la salsa de mostaza y miel son: salsa inglesa, guindilla, mermelada de cebolla, zumo de naranja, queso fresco batido o yogur, jengibre, canela, romero… si hasta el momento no habéis probado la salsa de mostaza y miel, empezad por la base y después id haciendo pruebas aromatizando con lo que más os guste. Ya nos contaréis y nos propondréis vuestras recetas de salsas.