Si os gusta terminar vuestros desayunos o postres con un poco de salsa de chocolate o algún sirope del estilo, pero no queréis que sea algo rico en azúcares, grasas ni conservantes, os recomendamos probar las salsas de chocolate que podéis hacer en casa. Hace un tiempo os enseñamos nuestra receta de salsa de chocolate light, sin grasa y sin azúcar, y hoy os traemos otra alternativa que está de vicio, es la salsa de chocolate, avellanas y café.
Esta salsa es ideal para cantidad de postres, desde macedonias de fruta fresca a helados, tartas, flanes, etc. También es una buena salsa para añadir a las gachas de avena de los desayunos, por ejemplo. Y es buena porque es una salsa nutritiva, sus ingredientes son el cacao puro, las avellanas y el café, lo único que se puede considerar poco saludable es el endulzante o edulcorante que se añada, pero se puede elegir el menos malo y también poner la cantidad que se desee. Esto no quiere decir que se pueda añadir tanto sirope de chocolate, avellanas y café como se desee, pero seguro que os aportará más beneficios a la salud y al paladar que cualquier salsa light comercial.
Ingredientes
- 50 gramos de mantequilla de avellanas (o crema de avellanas, puede ser casera)
- 40 gramos de pasta de cacao puro (tableta)
- 100 gramos de agua
- 1 c/p de café soluble
- c/n de endulzante o edulcorante.
Elaboración
Prepara en un cuenco la mantequilla de avellanas que habrás dejado a temperatura ambiente. Por otro lado, trocea la tableta de cacao puro y ponlo en otro cuenco con la mitad del agua. Introduce este cuenco en el microondas y programa unos 30 segundos, cuando el agua esté caliente, fundirá fácilmente el chocolate simplemente batiendo con una cuchara.
Una vez que el chocolate se haya fundido con el agua, añade el café soluble y vuelve a mezclar. Entonces incorpora el resto del agua tibia poco a poco, y también la mantequilla de avellanas. Mezcla de nuevo hasta obtener una salsa fina y homogénea.
Para terminar, añade el endulzante o edulcoran te al gusto, puedes ir probando cuando lo vayas integrando para obtener el punto de dulzor al gusto. En el caso de añadir miel o un edulcorante líquido se disolverá fácilmente, pero si se añade azúcar moreno o similar, es preferible añadirlo cuando se acaba de fundir el chocolate, pues estará más caliente y se disolverá mejor.
Una vez que la salsa de chocolate, avellanas y café tenga el punto deseado de dulzor, deja enfriar totalmente antes de pasarla a un biberón o a una salsera para tenerla lista para servir. Es posible, como hemos comentado antes, que, debido a las diferencias en la densidad de la mantequilla de avellana, que en vuestro caso necesitéis más o menos cantidad de agua, así que siempre tenéis que adaptarla a vuestras necesidades y gusto.
Puede ser también que te guste con más sabor a chocolate, pues para rectificarlo bastará con añadir un poco de cacao puro en polvo, y volver a probar de dulzor.
Acabado y presentación
Una vez que la salsa de chocolate saludable está lista para servir, se puede presentar en la mesa en una salsera o simplemente dispensarla sobre los postres o desayunos en la cocina, con ayuda de una cuchara o de un biberón. Si se va a guardar varios días, puedes reservarla en el frigorífico o en lugar fresco, el frío de la nevera siempre la endurecerá más, pero para aligerarla simplemente habrá que dejarla a temperatura ambiente o introducir el biberón en un baño maría.
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria