Rosquillas de San Isidro: Rosquillas listas

Se acerca la celebración de San Isidro, festividad madrileña en la que no pueden faltar los dulces tradicionales, las Rosquillas de San Isidro. Seguramente las conocéis, y hablamos en plural porque se elaboran varios tipos de rosquillas, las tontas, las listas, las de Santa Clara y las francesas. Hoy preparamos las Rosquillas listas.

Estas rosquillas se caracterizan por su glaseado aromatizado con limón, algo más elaboradas que las rosquillas tontas que únicamente se pintan con huevo. Sobre la masa hay que decir que se conocen distintas fórmulas, aunque al parecer, la elaboración más sencilla es la tradicional, únicamente mezclando tres ingredientes como veréis a continuación.

Es posible que las rosquillas tontas de San Isidro, que resultan más insípidas, hayan querido mantenerlas entre la repostería tradicional enriqueciendo el sabor y aroma en la masa, por eso en la mayoría de casos se añade limón y anís. Aunque las rosquillas de San Isidro están cargadas de azúcar por los glaseados, son una elaboración horneada, método de cocción que preferimos a la fritura, quizá más que nada porque nos permitimos repetir…

Ingredientes (36 rosquillas aprox.)

Para la masa
  • 300 gramos de harina
  • 300 gramos de aceite
  • 300 gramos de huevos (5-6 según tamaño).

Para el almíbar
  • 800 gramos de agua
  • 400 gramos de azúcar.

Para el baño o fondant
  • 400 gramos de azúcar glas
  • 20 gramos de zumo de limón
  • 170 gramos de almíbar
  • 20 gramos de caramelo líquido (azúcar quemada).

Elaboración

Para preparar la masa, vierte los tres ingredientes en una amasadora, y amasa durante veinte minutos aproximadamente, obtendrás una masa fina, homogénea y densa, para escudillar con la manga pastelera. Será necesaria una boquilla lisa y gruesa.

Precalienta el horno a 220º C con calor arriba y abajo. Dispón tres bandejas con papel vegetal, silpat o teflón. Introduce la masa en la manga pastelera y ve escudillándola, dándole forma de rosquilla y dejando espacio entre cada una porque crecerán al hornear. Deja un buen agujero porque se cerrará un poco al aumentar el volumen de la masa.

Hornea las rosquillas durante 10-12 minutos, hasta que estén doradas. Mientras tanto pon en un cazo el agua y el azúcar para hacer el almíbar. Lleva a ebullición y deja cocer cinco o diez minutos. Apaga el fuego y reserva.

Cuando retires las rosquillas del horno y hayan perdido algo de temperatura, sumérgelas en el almíbar y deposítalas en la mesa de trabajo o sobre las bandejas.

Prepara el baño, pon el azúcar glas en un recipiente que te resulte cómodo para después bañar las rosquillas, añade el almíbar caliente, el zumo de limón (si quieres que se pronuncie más el limón, puedes añadir aroma) y el caramelo, bate bien hasta obtener un fondant ligero.

Ve pasando las rosquillas por el fondant y después deja que se seque un poco, a continuación, el baño estará un poco más frío pero todavía líquido, con una cuchara o con los dedos, ve cogiéndolo y vertiéndolo sobre las rosquillas que tendrás en una bandeja (por comodidad a la hora de cambiarlas de sitio).

Deja secar las Rosquillas listas de San Isidro unas horas, cuando el baño esté seco y crujiente estarán listas para comer.

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