Al abrir una caja de polvorones y mantecados, en muchos hogares son los Roscos de vino lo que se quedan, aunque también hay quien prefiere este dulce a otros de los que contiene la caja, al menos así lo hemos vivido durante muchos años, hasta que los Roscos de vino eran caseros y había que repartirlos para que todos tuvieran oportunidad de probarlos.
Hay varias recetas de roscos, la mayoría se elaboran con vino dulce, generalmente moscatel. También varían otros ingredientes como las especias o aromatizantes, algunos incluyen semilla se anís, otros licor… El sésamo también es un ingrediente opcional, pero ya sabéis que a nosotros nos encanta, así que nuestros roscos de vino también tienen esta deliciosa semilla.
Si queréis que vuestros invitados se rifen los roscos de vino, probad esta receta. Recordad que el vino dulce podéis cambiarlo por el que más os guste.
Ingredientes (25 unidades aprox.)
- 360 gramos de harina
- 40 gramos de manteca de cerdo ibérico
- 70 gramos de vino dulce (hemos utilizado un Monastrell de Jumilla)
- 100 gramos de azúcar glas
- 65 gramos de aceite de oliva suave
- 10 gramos de ajonjolí
- 10 gramos de licor de anís
- azúcar glas para decorar.
Elaboración
Precalienta el horno a 180º C. Pon en un cazo el aceite de oliva de sabor suave con las semillas de sésamo o ajonjolí a fuego lento, calienta hasta que las semillas desprendan su aroma y el aceite no esté crudo, no debe hervir.
Tamiza la harina y ponla en un cuenco junto a la manteca, el vino dulce, el azúcar glas y el anís. Incorpora a continuación el aceite tostado con las semillas y amasa hasta obtener una masa homogénea.
Extiende la masa sobre una superficie de trabajo si quieres dar forma a los roscos con un cortapastas, si deseas hacer los roscos más gruesos y dándoles forma a mano, no hará falta. Con los cortapastas será necesario disponer de las dos medidas aproximadas que veis en la galería de imágenes, estos roscos de vino finos son ideales para envolverlos con papel de seda de dos en dos.
Si quieres hacer los roscos gruesos, corta porciones un poco más grandes que una nuez y estira haciendo rodar sobre la superficie de trabajo hasta obtener un cilindro y une sus extremos.
Dispón los roscos ya formados sobre la bandeja del horno cubierta con una lámina de teflón, silpat o papel sulfurizado. Hornea los roscos de vino, los finos durante 12 minutos aproximadamente, los gruesos necesitarán un poco más, hasta que estén ligeramente duros por fuera aunque su interior esté tierno, cuando se enfríen estarán crujientes pero no secos.
Cuando retires los roscos de vino del horno debes disponer de un cuenco con abundante azúcar glas, en cuanto puedas tocarlos sin quemarte, pásalos por el azúcar para que se queden bien blancos. Si haces el azúcar glas con la Thermomix, procura que quede bien pulverizado para que se agarre mejor.
Deja enfriar los roscos de vino antes de probar el primero, el que te convencerá de que es mejor hacerlos que comprarlos. Después puedes envolverlos en papel de seda o conservarlos en una caja especial para compartir con tus comensales. Os recomendamos dar un vistazo a las recetas de polvorones y mantecados publicados en Gastronomía & Cía.
10 comentarios
Todavía no los he hecho este año, en mi casa son los favoritos y no puedo dejar de hacerlos ni un año, si no…no seria Navidad.
Los vuestros tienen una pinta muy rica, yo los hago con aceite de oliva, no le pongo manteca.
Un besote
Que fantásticos, y estos son un clásico de casa, que delicia cuando das el bocado y se rompe en al boca…me gusta vuestro toque, no les ponia yo vinillo dulce y creo que mejorarán.
Mil gracias de nuevo
Un beso
Que pinta tienen… esta os la «copio» yo 😉
Que buenos están los roscos de vino con el cafetito de por la tarde, justo después de comer.
Un fuerte abrazo familia
Los próximos los haremos con aceite de oliva totalmente, seguro que están tan o más deliciosos que estos Auro.
El vinillo les da un sabor increíble y duraron un suspiro, como decía Iscariote en otro comentario, el cinturón ya lo hemos empezado a aflojar y aún no hemos comenzado las fiestas navideñas.
Un abrazo a tod@s
Hola!!! Primero quiero felicitarlos porque la pagina está espectacular. Acabo de descubrirla y me encanto. Me gustaría saber si es necesario calentar el aceite si no pongo las semillas de sésamo. Saludos y espero que hayan empezado bien el año.
Hola Cora, nos alegran mucho tus palabras, muchas gracias!
El aceite hay que calentarlo aunque no pongas las semillas porque de lo que se trata es de que no proporcione su sabor crudo, no se debe calentar mucho, no dejes ni que empiece a humear, sólo que pierda su sabor crudo.
También te deseamos un Feliz Año y esperamos seguir leyéndote.
Un saludo
queria saber… no lleva ningun tipo de levadura?
No estan buenos estan lo siguiente, es la autentica receta de un panadero que jamas se la dio a nadie y en cambio la he encontrado aquí y están igual, gracias.
Hola,
De este año no pasa hacerlos.. que tienen una pintaaaaaa.. esta semana ya me pongo a practicar ¿el sésamo es crudo o tostado?
Gracias
Muchas gracias Ana!! Nos alegra mucho que te hayan gustado, ya hay que ir preparando para las próximas fiestas 😉
Jen el sésamo es crudo, lo puedes encontrar en tiendas de dietética o en grandes superficies, comercios de especias…
Saludos