El Restaurante Arrocería El Rincón del Faro es un establecimiento familiar que se encuentra en Cullera (Valencia), establecido por Encarna Pérez, cocinera dedicada a la cocina tradicional y mediterránea. Su filosofía y estilo de cocina posicionó a este establecimiento como uno de los mejores de la ciudad para disfrutar de productos de calidad y bien ejecutados, algo que a veces resulta difícil de encontrar en municipios costeros, de turismo de sol y playa.
Ahora Encarna sigue en la cocina, pero ha dado paso a su hija Eva Mª que junto al chef Antonio Poussier desarrollan una cocina evolucionada, la cocina mediterránea con el prisma de la creatividad. Nos prepararon un menú degustación que dejó patente su respeto por el producto, el conocimiento y la lógica de la buena cocina, sin faltar el factor sorpresa de una mesa nueva para el comensal.
El relevo generacional de la cocina del Restaurante El Rincón del Faro no se acompaña con la evolución en el comedor, es decir, con la decoración y el mobiliario del establecimiento, éste mantiene las características de un restaurante en la playa, no sugiere ni una pista sobre la creatividad culinaria de la que se va a disfrutar, quizá tampoco sobre el espléndido servicio en sala. Realmente no fue en algo que nos detuviéramos a valorar mientras estuvimos en el restaurante, porque no dejaban de llegar otros mensajes que atrapaban nuestra atención, como la suculenta bodega de vinos y la propuesta de un menú degustación maridado que nos iban a ofrecer.
Es necesario destacar que el servicio en sala fue exquisito, tuvimos la fortuna de recibir la atención de dos promesas de La Nariz de Oro 2013, el primer sumiller del restaurante Javier Cantos Pérez y el segundo sumiller Pedro José Pérez, ambos son finalistas del prestigioso concurso de la copa negra. Se encargaron de realizar el maridaje con vinos de distintas Denominaciones de Origen, y su conocimiento y pasión por el oficio la pudimos contemplar en cada servicio.
En la cena nos acompañaron los representantes de una de las bodegas que tendría presencia en el maridaje, Bodegas Mustiguillo, que además nos presentaron un aceite de oliva virgen extra que pudimos catar, Calvestra, pero esperamos poder hacer una cata más pausada en casa para comentaros sus cualidades y características. Así que vayamos con el menú degustación que como no podía ser de otra forma, dio comienzo con unos aperitivos que fueron los que nos situaron en la realidad de la cocina de El Rincón del Faro.
Empezamos con Jamón ibérico, queso y tomate, podéis verlo sobre estas líneas. Media esfera de queso cubierta con una fina gelatina, jamón crujiente, tomate seco y su salsa. Un bocado cremoso y sabroso que saboreamos con una primera copa de cava Pago de Tharsys Millesime Brut Rosé de 2009 (100% Garnacha).
El segundo aperitivo fue el Buñuelo de bacalao en tempura, espuma de asgarraet, virutas de mojama y sal negra de Hawai. El punto de sal estaba muy marcado en este plato, el ‘asgarraet‘ es una elaboración tradicional que se compone principalmente de pimiento rojo, bacalao y ajos. La combinación de sabores estuvo estupenda, el contraste de texturas también, aunque era un bocado suave. Su sabor nos situó en la cocina tradicional de esta zona de la Comunidad Valenciana, pero con una degustación original.
Pasamos a tomar un Albariño, Marieta 2011 D.O. Rias Baixas, elegido porque es muy fácil de beber y aportar un toque afrutado a un plato especiado, La Croqueta de Param. Es una receta de uno de los cocineros del restaurante, es de la India y al parecer es un experto en la elaboración de paellas. Dado que era una cena y teníamos planeadas otras comidas con arroz, en El Rincón del Faro no nos prepararon paella (pero sí su famosa fideuà), por lo que es la excusa perfecta para volver a esta arrocería. La croqueta es una delicia, una esfera muy crujiente que alberga en su interior un cremoso pollo al curry. Nos agradó que el punto especiado fuera equilibrado, hubo un tiempo en el que la moda de incorporar el curry en nuestra gastronomía consiguió que aborreciéramos esta combinación de especias, pero Param ha logrado con su croqueta de pollo que volviéramos a disfrutar de ella.
El siguiente plato fue el Pulpo ahumado, patata negra, jamón ibérico y su consomé, para el que nos sirvieron un vino D.O. Valencia como es el Cullerot 2011, un coupage de Macabeo, Malvasía, Pedro Ximénez, Verdil y Chardonnay. Nos comentaron que la bodega es de Moixent, el Celler del Roure, su propietario recuperó de una bodega medieval unas tinajas de unos 800 litros donde descansa este vino al que le otorgan cualidades de barrica, según cuenta por el trabajo de lías. Personalmente lo encontramos un vino con poco aroma y poco sabor, muy liviano en boca. Pero exquisito el pulpo en aceite ahumado (un aceite que conocemos y del que os hemos hablado en alguna ocasión, el Aceite de oliva arbequina ahumado de Castillo de Canena). Se acompaña de unas patatas en tempura de tinta de calamar y consomé de jamón ibérico.
Con el siguiente plato nos transportan a Navarra, fue un Huevo de corral con cremoso de patata e Idiazábal y chistorra, un plato muy correcto, irremediablemente sabroso con buenas cocciones (el huevo a baja temperatura) y una cremosidad muy agradable. Para acompañar nos sirvieron un vino de maceración carbónica, el Luberri 2011 D.O. Rioja.
Si tuviéramos que destacar alguno de los platos de este menú degustación, podríamos mencionar el Lenguado relleno de gamba rayada y erizo de mar con salsa de vino Chardonnay-Sauvignon blanc, aunque no sería el único. Estaba espectacular el punto de cocción, un pescado jugoso exquisitamente armonizado con otros productos del mar y una ligera salsa, como una suave bechamel de vino, y complementada con un matiz de crema de brócoli.
El vino que acompañó este plato fue el Mestizaje blanco 2011 de Bodegas Mustiguillo. Conocíamos el tinto con el mismo nombre de este vino de la D.O. El Terrerazo, pero en esta ocasión pudimos catar el fruto de un largo trabajo de la bodega con el que han querido enaltecer el valor de la variedad de uva Merseguera.
Se llama ‘Nuestra fideuà de foie’ y parece ser que es un plato emblemático del Restaurante El Rincón del Faro, es una Fideuà con pollo, boletus y foie que resulta muy sabrosa, de sabor muy intenso y reconocible, bien ejecutada y armonizada con El Cabernet de Chozas Carrascal 2009 (D.O. Utiel-Requena).
El último plato fue el Cochinillo lechal deshuesado, cocinado a baja temperatura, con compota de manzana y esfera de fruta de la pasión. Una guarnición perfecta para acompañar una carne muy melosa y grasa, el cochinillo estaba exquisito, y la compota de Granny Smith era una verdadera delicia con la que limpiar el paladar. El vino que acompañó este plato fue el Finca Terrerazo 2010, el primer vino de Pago del Mediterráneo, nos encanta.
Estupendo el pre-postre compuesto por una quenelle helada de piña, una sopa de leche de coco, unas fresas naturales y el aire de Malibú, digestivo, refrescante y suavemente limpia el paladar para disfrutar de un postre que también merece la pena probar y repetir en este restaurante, la Torrija caramelizada de chocolate blanco y leche merengada valenciana. El maridaje elegido para el postre fue un Espumoso de Monastrell (D.O. Alicante), no fue nuestro preferido porque era demasiado dulce para acompañar un pan de brioche caramelizado que nos cautivó.
Pero como veis, la experiencia en general fue muy grata, y nos reservamos para otro momento el punto y final de esta velada, después del café llega la copa y en El Rincón del Faro tienen una carta con más de 170 ginebras y más de 70 tónicas diferentes. Descubrimos grandes joyas nacionales de las que os hablaremos próximamente, pero de momento ya las podéis ir a probar vosotros. Cullera es un buen destino turístico y no sólo por las playas y por su rica cultura histórica, también lo es por su gastronomía.
El Rincón del Faro
Calle Ciudades Unidas, 1
Cullera (Valencia)
1 comentarios
Excelente maridaje de unos vinos ricos en aromas, acidez, texturas, taninos muy bien integrados con esa superior y excelsa comida mediterránea, de la que hace gala el «RIncón del Faro». A cargo de prestigiosos profesionales.