El año pasado anunciábamos las intenciones de regular la recogida de setas en Teruel, se trabajaba en una ordenanza en la que los municipios decidirían si acogerse o no a esta regularización. Como sabemos, cada vez son más las comunidades que desean regular la búsqueda y recogida de setas, y cada comunidad establece sus criterios. En algunas se debe pagar una tasa, y en otras se limita sólo la cantidad de setas que se pueden recolectar, en este caso se ha dispuesto una regulación de la recogida de setas en Teruel y concretamente en la comarca del Maestrazgo turolense.
Los buscadores de setas vecinos de la zona deberán pagar una tasa de 7 euros por temporada para el permiso recreativo y podrán recolectar hasta 15 kilos de setas por día, para los foráneos se ha habilitado el permiso recreativo para los ‘no vecinos’, podrán recolectar la misma cantidad de kilos pero el pago será de 20 euros. Un tercer permiso es el recreativo ordinario con el que se permite recolectar 10 kilos de setas a todos los aficionados, finalmente se deberá pagar 60 euros por el permiso comercial que sólo se le concede a los vecinos de la zona, así se dispone en la reglamentación de la recogida de setas en Teruel.
El precio no es desorbitado, podemos hacer una comparativa con lo que se debe pagar por la licencia para recoger setas en Soria o Navarra, comunidades en las que los vecinos deben pagar 5 euros por día y los foráneos 10 euros, para los vendedores, el permiso comercial tiene un coste de 240 euros anuales, suponiendo que no hayan subido los precios. Recordemos que la mayoría de comunidades que han aplicado esta regulación han seguido el ejemplo de la Marca de Calidad Setas de Castilla y León, la primera que empezó a funcionar y a cobrar por los permisos.
En el otro extremo se encuentra Guipúzcoa, esta comunidad tenía intención de regular la recogida de setas pero con diferencias respecto a las demás comunidades, no se necesitaría licencia, tampoco se establecerían cotos y no se debería realizar ningún tipo de pago. La intención era mostrar que no existe ánimo de lucro y que únicamente se pretende proteger los bosques y sus recursos. Se pretendía disponer una serie de normas, no remover la capa vegetal con herramientas, no coger setas pequeñas que aún deben desarrollarse, etc. La tarea para que se cumplieran estas normas estaría encomendada a los guardas forestales, de ello hablábamos en el post Guipúzcoa regulará la recogida de setas.
La comarca del Maestrazgo turolense está en un término medio que se podría considerar coherente. Con la llegada de los primeros níscalos y demás setas, vuelven las noticias sobre regulaciones, permisos, etc. Quizá estas regulaciones hagan que los buscadores analicen dónde resulta más económico buscar setas, y las comunidades con precios más elevados vean reducida la afluencia de buscadores aficionados y profesionales, no hay que olvidar que este colectivo genera riqueza en los pueblos colindantes, muchos aficionados compran productos locales, pan, embutido, etc., además el almuerzo en uno de los locales está casi garantizado.
Una novedad que no se contempla en la regulación de otras comunidades atañe a los expertos en micología, éstos pueden acceder a un permiso científico con el que podrán recolectar según la legislación para coger setas en Teruel, cinco ejemplares de cada especie de setas por día, en este caso y dado que la finalidad es científica o educativa, no se deberá abonar ninguna cuota.
Como es lógico, se han establecido una serie de medidas para que los buscadores respeten la obligación de obtener la licencia para recoger setas y la legislación, las sanciones por incumplimiento de las normativas varían según la infracción pudiendo llegar a los 3.000 euros. Nosotros ya tenemos preparada la cesta de mimbre y la navaja para setas, esperamos que en breve podamos ir a recoger nuestras primeras setas, siempre confiamos en un amigo de Fredes (pueblo de la comarca del Bajo Maestrazgo, Castellón) que nos dice cuándo debemos acudir a los bosques. Puedes conocer más detalles ha través de la publicación digital Levante.