La Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento Europeo, ha solicitado reducir el uso y riesgo de todos los pesticidas químicos un 50% en la Unión Europea para 2030. Se trata de una medida reivindicada en varias ocasiones que persigue llevar a cabo una transición hacia un uso más sostenible de los pesticidas, lo que beneficiaría al medio ambiente y a la salud de los consumidores.
Esta propuesta forma parte de un paquete de medidas cuyo objetivo es reducir la huella medioambiental del sistema alimentario de la Unión Europea, además de intentar mitigar las pérdidas económicas causadas por el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. La Comisión también ha solicitado reducir un 65% los productos fitosanitarios catalogados como más peligrosos. Estas medidas se basan en los datos sobre el promedio de uso de pesticidas y otras sustancias químicas en el periodo 2013-2017, algo que coincide más o menos con la propuesta de la CE de realizar una reducción del 50% en base a los datos de uso medio del período 2015-2017.
Ayer se aprobaba en el Parlamento Europeo por 47 votos a favor, 37 en contra, y dos abstenciones, el texto en el que se establecen las medidas para garantizar el uso sostenible de los pesticidas, así como su uso y riesgo. Los eurodiputados solicitan que cada país miembro adopte estrategias y objetivos en base al volumen anual del uso de productos fitosanitarios, el nivel de peligrosidad y la extensión de superficie agrícola tratada. Posteriormente, la CE se encargaría de verificar si estos objetivos establecidos por los países miembros, deben ser más estrictos y ambiciosos, a fin de poder alcanzar el objetivo establecido para el año 2030.
A fin de lograr maximizar el impacto de las estrategias nacionales que se establezcan, cada país miembro deberá implementar unas reglas concretas para al menos cinco cultivos, con el objetivo de que la reducción del uso de pesticidas tenga un mayor impacto. El Parlamento Europeo también quiere prohibir el uso de los pesticidas, salvo los autorizados para la agricultura ecológica y control biológico en zonas consideradas sensibles como, por ejemplo, los espacios verdes urbanos.
Europa tiene una dependencia muy elevada de los pesticidas, recordemos que organizaciones de consumidores como Foodwatch, aseguraban en un informe del año pasado que los productos fitosanitarios habían capturado completamente el sistema agrícola de la Unión Europea. Basta con dar un vistazo a este informe sobre el contenido de residuos de plaguicidas en los alimentos de la Unión Europea que elabora cada año la EFSA (Agencia de Seguridad Alimentaria de la Unión Europea), para darse cuenta de ello.
Los eurodiputados consideran que este año la Unión Europea debe establecer un objetivo que favorezca la comercialización de pesticidas de bajo riesgo, seis meses después de la entrada en vigor del reglamento, a fin de proporcionar a los agricultores alternativas a los productos que utilizaban. Se insta también a que los pesticidas químicos sólo se utilicen como último recurso, tal y como establece la Gestión Integrada de Plagas y cuyas directrices podéis leer aquí, y así poder reducir o minimizar los riesgos para la salud humana y para el medio ambiente.
La votación celebrada ayer es un paso más hacia la reducción significativa del uso de pesticidas químicos para el año 2030, los eurodiputados ven positivo y con optimismo que se haya podido llegar a acuerdos sobre compromisos viables en el uso de productos fitosanitarios, proporcionando además asesoramiento independiente y gratuito sobre medidas preventivas basadas en la gestión integrada de plagas a los agricultores europeos. Ahora, y según leemos en la página del PE, el siguiente paso es iniciar las negociaciones con los estados miembros sobre los mencionados objetivos a partir del próximo mes.
Será interesante ver cómo encaja el glifosato en las acciones que se pretenden acometer, recordemos que la EFSA determinó recientemente que el glifosato no tiene áreas críticas de preocupación, facilitando su renovación del permiso de uso. Aunque existen varios estudios que apuntan a la peligrosidad del herbicida, la Agencia Europea de Sustancias Químicas (ECHA) concluyó que el glifosato no cumplía con los criterios científicos para ser clasificado como sustancia cancerígena, mutagénica o reprotóxica, la verdad es que no tardaremos mucho en conocer su clasificación en este contexto de la reducción del uso de pesticidas químicos en la producción de alimentos.
Foto 1 | Chafer Machinery