Nuestras preferidas (quizá) son las sales aromatizadas con setas deshidratadas, pues éstas son especialmente sabrosas y son un perfecto sustituto de la sal. Además, nos pierde la sal con sésamo, también conocida como ‘Gomasio’, y para ciertas recetas nos gusta condimentar con un toque cítrico, para otras con un punto picante, y la combinación de estos dos elementos es otro gran acierto para reducir el consumo de sal y disfrutar de una comida sabrosa.
Hay mil y una opciones de aromatizar la sal, y es algo más que un capricho gastronómico, ya que reducir el consumo de sal es más fácil con sal especiada, y como bien sabemos, la mayoría de la población nos excedemos en el consumo de sal, tomamos más de la que creemos, pues no es sólo la que añadimos cuando cocinamos o a nuestros platos, también cuenta la que llevan todos los alimentos que compramos procesados y ultraprocesados. Ingredientes deshidratados (que al eliminar su agua, potencian su sabor), hierbas aromáticas y especias, son los principales ingrediente para hacer sal aromatizada.
Y aunque en el mercado podemos encontrar una gran oferta, la sal especiada la podemos hacer en casa fácilmente. Lo podéis ver con las propuestas que os dejamos bajo estas líneas, tenéis 25 recetas de sales especiadas o aromatizadas para elegir. Algunas servirán para cualquier plato, otras son más adecuadas para verduras, otras para pescados, otras para carnes… Algunas son ideales para cocinar y otras para condimentar cuando la comida ya está servida en el plato.
Veréis que utilizamos distintos tipos de sal, desde la sal marina hasta la sal negra en escamas, pasando por la sal ahumada, los cristales de sal o la popular sal rosa del Himalaya. Elegid la que más os guste o utilicéis para hacer vuestras sales aromatizadas, al margen de modas, puesto que, de momento, la recomendación que no debemos obviar es que debemos consumir un mínimo de sal porque es un elemento imprescindible para el organismo, y que conviene tomar sal yodada para no tener carencias de elemento químico esencial.
Un par de detalles más antes de pasar a ver las recetas de sal especiada que podéis hacer en casa, por un lado, decir que la proporción de sal y condimentos la podéis variar al gusto y según vuestras necesidades o vuestro paladar, pues hay personas que por salud deben reducir a mínimos el consumo de sal, en ese caso recomendamos que la proporción de los aromatizantes sea mayor. Siempre se puede probar el resultado poniendo un poco de sal sobre cualquier alimento y después rectificar.
Para terminar, comentar también que las sales especiadas y aromatizadas, además de aroma y sabor, aportan color a los platos, los embellece, los hace más atractivos, así que no dudéis en disponer de variedad de sales, especias y hierbas aromáticas en vuestra despensa, veréis que es un placer ampliar la biblioteca de sabores con vuestras comidas.
Sal aromatizada con setas y tomate
Sal de setas y avellanas
Sal de setas y chalota
Sal rosa con boletus
Gomasio negro con guindilla
Gomasio con chipotle, ajo y limón
Sal de curry
Sal de jengibre, chile y pimienta de Sichuan
Sal negra con chile y limón
Sal ahumada con zumaque
Sal de lima y pimentón
Sal con ajo y hierbas aromáticas
Flor de sal ahumada con anís, cilantro y cardamomo
Flor de sal con cinco pimientas
Sal ahumada de pimiento, chalota y ajo
Sal de romero, mostaza y naranja
Sal de sésamo y wasabi
Sal de enebro
Sal de pimiento asado
Sal ahumada de patata violeta
Sal de pimienta de Sichuan y salvia
Sal de alga nori
Sal de rosas, romero y naranja
Sal de vino
Sal de perejil