Hace unos días os adelantábamos que os íbamos a enseñar cómo hacemos la salsa bechamel para los canelones, una receta heredada que tiene un toque que hace que se parezca a la clásica salsa soubise, os lo explicábamos en este post titulado ‘Salsa soubise: Mucho más que una simple bechamel’.
Pues bien, aquí tenéis nuestra receta de salsa bechamel con cebolla al estilo de la salsa soubise, podéis tomar nota de los ingredientes y de la elaboración paso a paso, en la que incluimos algunos consejos y tips que os resultarán de gran utilidad. Y también podéis ver la videoreceta, comprobad la textura ligera que queremos para la salsa.
Y recordad que esta bechamel con cebolla o soubise es perfecta para muchas otras recetas, pero en algunos casos podéis querer que quede algo más densa, por ejemplo, para napar un pescado, podéis hacer esta misma receta con unos 10 o 15 gramos más de harina. O en lugar de harina, se puede poner Maizena, que también aporta un extra de suavidad. Os esperamos en la cocina.
Ingredientes
- 80 gramos de harina
- 100 gramos de mantequilla
- 1 c/s de aove (opcional)
- 1 cebolla dulce grande
- 1 litro de leche
- c/n de sal
- c/n de nuez moscada
- c/n de pimienta negra recién molida.
Elaboración
En primer lugar tuesta la harina en una cazuela a fuego medio y moviendo con frecuencia para que se tueste de forma homogénea. También se puede tostar en el horno, pero sólo merecerá la pena si el horno se enciende para hacer algo más.
Mientras se va tostando la harina, pela la cebolla y tritúrala en un robot de cocina, en su defecto, puedes rallarla y si después quieres una salsa más fina, podrás triturarla con la batidora de mano.
Sabrás que la harina está tostada cuando el olor sea más parecido al de los frutos secos y el color pase a blanco roto. Entonces retira la harina de la cazuela y deja que pierda temperatura antes de añadir la mantequilla para que no se funda demasiado rápido, que no se queme.
Pon la mantequilla en la cazuela a fuego medio-bajo y cuando está prácticamente fundida, añade la cebolla triturada y sal, pocha lentamente hasta que empiece a tomar color moviendo de vez en cuando. Además de la mantequilla, puedes añadir un poco de aceite de oliva virgen extra para darle el toque, pero es completamente opcional.
Cuando la cebolla esté pochada, vuelve a llevar a la cazuela la harina tostada y mezcla bien. Empieza a añadir la leche templada y a batir con las varillas para que se vaya integrando. La salsa bechamel o la salsa soubise para los canelones conviene que quede bastante ligera, pues así quedarán los canelones más cremosos, y porque con el horneado espesará más.
Aunque en esta receta estamos enseñando cómo utilizamos la salsa para los canelones, puede hacerse esta misma bechamel con cebolla para cualquier otra receta. Y el tip que recomendamos totalmente si lo que se cocina se va a gratinar, es añadir un poco de pan rallado, aporta un toque más crujiente y un sabor delicioso.
Y ya, el extra de la exquisitez está en añadir cuatro ‘pizcas’ de mantequilla repartida sobre el queso rallado… Los comensales, que estén esperando en la mesa cuando los canelones estén en el horno, porque es un plato que no espera.
Así que a comer y disfrutar. ¡Buena cocina y buen provecho!
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria
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