Además del Atún teriyaki, hemos preparado el Pollo teriyaki y brocheta de champiñones con salsa de mostaza a raíz de la elaboración casera de la salsa teriyaki que os comentamos. Decir que es igualmente sabroso (aunque preferimos el atún), una elaboración muy sencilla pero que provoca chuparse los dedos. Hay aderezos que merecen una distinción especial. La brocheta de champiñones acompaña muy bien en este plato, le da el punto fuerte de sabor
Ingredientes (4 comensales)
- 8 muslos de pollo
- 12 champiñones
- 100 mililitros de vino blanco
- 80-100 mililitros de salsa teriyaki
- 2 cucharadas de mostaza antigua
- 1 cucharada de miel
- la piel de media naranja
- 1 ramita de canela
- raíz de jengibre (unos 4 cm.)
- shichimi
- aceite de oliva virgen extra
- sal.
Elaboración
Retira la piel de los muslos de pollo y déjalos sumergidos en la salsa teriyaki unas horas. Pon un chorrito de aceite en una cazuela o sartén amplia y ponla a fuego medio para hacer los muslos de pollo lentamente. Durante la cocción, cada vez que vayas girando los muslos para que se hagan uniformemente, riega con una cucharada de salsa teriyaki.
Mientras el pollo se va haciendo, prepara los champiñones que ya tendrás limpios de tierra. Rehógalos enteros y salados al gusto en una sartén con un poco de aceite, cuando se hayan dorado ligeramente, vierte el vino blanco y deja reducir.
Cuando el vino se haya reducido sólo un poco, incorpora la mostaza, la miel, la canela, la piel de la naranja, el jengibre fresco rallado, una pizca de shichimi y dos cucharadas grandes de salsa teriyaki, mezcla bien y sofríe hasta que reduzca completamente, los champiñones deben quedar enteritos, ligeramente crujientes.
Emplatado
Ensarta los champiñones en unas pequeñas brochetas y sírvelas con el pollo teriyaki en los platos de servicio. Junta en una sartén los jugos de ambas elaboraciones (retirando la canela y la piel de naranja) y lígalas, sirve una cucharada de la salsa de mostaza-teriyaki resultante. Da color al plato con un rabanito o un tomate cherry asado.