Compartimos esta receta de Garbanzos con fondo de cordero pensando en los que, como a nosotros, prefieren disfrutar de las legumbres en un plato que no esté cargado de grasas, pero sí de sabor. Hacemos los garbanzos de muchas formas, pero casi nunca hacemos los guisos tradicionales en los que se añade chorizo, panceta, etc. Esta receta de garbanzos es una de las que más nos gustan, pues los cocemos con un fondo de cordero que le da un sabor exquisito.
Ayer preparamos un fondo de cordero, muy similar a este fondo oscuro de cordero, variando algunas especias y vegetales y en mayor proporción. Con parte de este fondo volvimos a hacer el Risotto de cordero, y con el resto hemos hecho esta receta de Garbanzos ligeros y sabrosos. Aún nos faltará mostraros el paté de hígado de cordero y los canelones de cordero tan sabrosos que se pueden hacer con el hígado y con la carne rustida utilizada para hacer el caldo. No sólo deleitamos al paladar, además hacemos un favor al bolsillo.
Ingredientes (4 comensales)
- 360-400 gramos de garbanzos secos
- 1 litro de fondo de cordero
- agua (la necesaria para cubrir los garbanzos)
- 1 patata
- aceite de oliva virgen extra
- 2 c/s de paté de hígado de cordero (o el que tengas, aunque es opcional)
- 4 dientes de ajo
- 1 hoja de laurel
- ½ c/c de comino molido
- ½ c/c de tandoori masala
- 1 c/c de tomillo
- 1 c/c de pimentón de la Vera
- sal.
Elaboración
La noche anterior pon a remojo los garbanzos, recuerda la importancia o el por qué de poner las legumbres en remojo, y el truco que puedes utilizar si se te olvidó para acelerar su hidratación.
Puedes seguir esta receta de fondo de cordero para hacer estos garbanzos, o hacer el caldo de cordero como más te guste, así está asegurado el éxito de este plato. Con respecto a la temperatura del agua o caldo para cocer los garbanzos hay discusión, es conocido popularmente que los garbanzos deben añadirse al caldo hirviendo para que salgan tiernos, pero realmente no es imprescindible, unos garbanzos pedrosillanos o lechosos salen tiernos aunque partan de agua fría en la cocción.
Así que decide cómo prefieres hacerlo, nosotros en esta ocasión pusimos los garbanzos escurridos del agua de remojo (ésta la desechamos), la patata pelada y troceada, añadimos el fondo de cordero y a continuación agua hasta cubrir los garbanzos dos dedos por encima, un chorrito de aceite de oliva, el comino, el tomillo y una hoja de laurel.
Lleva a ebullición y deja cocer, con la olla tapada, una hora aproximadamente a fuego lento, sin que deje de hervir pero sin demasiadas ‘turbulencias’ del líquido. El tiempo dependerá de la variedad y tamaño del garbanzo, y de la olla utilizada, en olla exprés o en la FussionCook tardará menos.
Cuando los garbanzos estén casi listos, pon un chorrito de aceite de oliva en una sartén, pela y pica los ajos y sofríelos, añade el paté, mezcla bien hasta que se deshaga y retira la sartén del fuego, incorpora entonces el tandoori y el pimentón, que sólo con la temperatura del aceite ya desprenderán su aroma y sabor. Vierte este preparado en la olla de los garbanzos, mezcla bien y vuelve a tapar. Deja reposar cinco minutos antes de servir.
Esperamos que os gusten y que compartáis vuestra opinión cuando los probéis, y también vuestras recetas, claro, hay que comer legumbres.