Cuando la cocina huele a especias es que la cosa va bien. Poco más hace falta cuando este perfume te envuelve, para acompañar la receta de calabaza especiada basta cualquier otro nutriente, una pechuga de pollo a la plancha, arroz, cuscús… un ingrediente que proporcione otro tipo de nutrientes para equilibrar el plato y de sabores suaves para respetar su sabor.
Hoy hemos hecho esta calabaza con especias como ingrediente principal, es como cuando te apetece algo de chocolate, hoy nos apetecía disfrutar de una mezcla de especias y la calabaza es ideal para disfrutarlas. Después había que buscar algo para completar el plato, y lo que hemos hecho ha sido dorar unas tiras de pollo con ajo picado y unas judías blancas aderezadas con aceite de jengibre. Así hemos obtenido un plato muy completo en todos los aspectos.
También puedes hacer la calabaza como guarnición de un pescado u otra carne, o como entrante para tomar solo o con una salsa de yogur. Os lo contamos aún con su sabor en nuestro paladar, y nos dan ganas de repetir…
Ingredientes
- 1 calabaza butternut
- 1 ramita de romero fresco
- 8-10 bayas de pimienta de Jamaica
- 4 bayas de pimienta verde
- 5 bayas de cardamomo
- 1 c/c de comino en grano
- ½ c/c de shichimi (u otra mezcla de especias picante)
- 1 c/c de hierbabuena seca
- ¾ c/c de cúrcuma
- 1 c/c de chalota liofilizada
- aceite de oliva virgen extra
- sal.
Elaboración
Pon en un mortero o suribachi (este último va mejor para moler las especias por sus surcos) todas las especias, retirando las cáscaras del cardamomo previamente. Muele hasta que las bayas se rompan y tanto como tú quieras, puedes hacer polvo o dejar la mezcla de especias algo tosca.
Corta la calabaza primero por la mitad, luego en cuartos y cada cuarto en tiras de unos dos o tres centímetros de grosor. Retira las semillas y la piel de la calabaza.
Pon una sartén con un poco de aceite de oliva al fuego y cuando esté caliente incorpora la calabaza salada al gusto. Cuando se haya dorado por un lado dale la vuelta y deja que se dore por el otro, entonces baja a fuego medio y continúa dorándola por todos los lado.
En el momento en que casi esté lista, añade la mezcla de especias para que proporcionen todo su aroma y sabor sin quemarse. Si ves que se queda muy seca la sartén, reduce el fuego a temperatura media y si fuera necesario agrega un poco más de aceite.
Una vez que la calabaza esté tierna y las especias hayan desplegado sus poderes aromáticos, retira la sartén del fuego y ya está lista para servir.
Cuando sirvas la calabaza especiada en los platos riega con el aceite que ha quedado en la sartén.