Con unos hermosos calabacines podemos hacer un entrante o aperitivo como el Ravioli de calabacín relleno de setas y foie gras o foie micuit, según el presupuesto. Este mismo plato se puede hacer con calabacines más pequeños y hacer dos o tres raviolis por comensal si va a ser un primer plato, acompañado de unos brotes tiernos será un plato muy completo.
El Ravioli de calabacín relleno es una delicia que puedes elaborar como parte de un menú festivo. Es muy sencillo de hacer y también es interesante saber que el relleno lo puedes tener preparado y será cuestión de minutos terminar el plato poco antes de servir.
Ingredientes
- 2 calabacines grandes
- 150 gramos de foie gras
- 150 gramos de setas variadas
- 200 mililitros de leche
- 1 c/s de harina
- 60 gramos de queso fresco
- 1 chalota
- 2 dientes de ajo grandes
- 4 cucharadas de pan rallado con parmesano y mostaza en grano (como el de esta receta de solomillo)
- cebolla frita
- pimienta negra
- nuez moscada
- sal negra de Hawai
- sal corriente
- aceite de oliva virgen extra
- aceite de pimienta rosa
- reducción de Pedro Ximénez.
Elaboración
Para hacer el relleno, rehoga en una sartén las setas con un diente de ajo picado, cuando estén listas ponlas en el vaso de la batidora y tritura. En la misma sartén pocha la chalota picada con un poco de aceite (o mantequilla), añade la harina, tuéstala unos minutos y añade la leche, pimienta negra, nuez moscada y sal al gusto, mezcla bien con unas varillas hasta obtener una bechamel fina. Incorpora entonces las setas trituradas y el foie gras, mezcla bien y añade el pan rallado mezclándolo hasta obtener la consistencia del relleno deseada, reserva.
Lava los calabacines y córtalos en finas láminas a lo largo, puedes utilizar una mandolina para ello. Haz las láminas de calabacín a la plancha con un poco de aceite y sal, haz también las láminas desiguales de los primeros cortes del calabacín que después servirán para hacer la salsa.
Acompañamos estos ravioli con una salsa de calabacín y queso fresco muy fácil de hacer. Ponemos las láminas de calabacín sobrantes en el vaso de la batidora, añadimos el queso fresco y un diente de ajo (puede ser crudo o confitado, según prefieras), añade sal, pimienta y un chorrito de aceite de oliva y tritura.
Emplatado
Dispón en la mesa de trabajo dos lámina de calabacín formando una cruz, pon justo en el centro dos cucharadas del relleno de foie gras y setas, cierra como si fuera un paquete poniendo los extremos de las láminas sobre el relleno y dale la vuelta para posar el ravioli en el plato de servicio.
Sirve a un lado la salsa de calabacín y queso además de la cebolla frita crujiente, reparte un poco de sal negra de Hawai sobre los ravioli, aceite de pimienta rosa y reducción de Pedro Ximénez. Ya puedes servir y disfrutar de este plato acompañado de unos panecillos de nueces o unas finas tostas.