Veganuary es una organización sin ánimo de lucro que desde hace más de 10 años invita a todas las personas a experimentar el veganismo durante el mes de enero, ofreciendo recetas, planes de comidas y consejos para que la transición sea fácil, divertida y deliciosa. En esta ocasión y con el deseo de que se sumen más personas a probar esta dieta el próximo enero, se ha puesto en marcha la campaña «¿Raro? Prueba el veganismo este enero«, con la que se persigue desafiar las percepciones tradicionales sobre los alimentos de origen animal.
A diferencia de otros años, en vez de centrarse en los beneficios para la salud y el medioambiente por seguir una dieta vegana, la campaña se enfoca en la perspectiva de que ciertos hábitos alimenticios que consideramos normales, pueden ser en realidad extraños e incluso sorprendentes, así se refleja con los anuncios que han preparado para la campaña. Encabezando el post podéis ver un cerdo con forma de salchicha y le acompaña una reflexión en la página de la organización, «Las salchichas son literalmente cerdos embutidos en sus propios intestinos».
Otra imagen muestra unos pollos cuyo cuerpo está rebozado y que inevitablemente, recuerdan al pollo rebozado o los nuggets de pollo de las cadenas de comida rápida. La organización explica que el pollo viene de aves criadas para crecer tan rápido que a menudo no pueden mantenerse en pie, son el resultado de una cría selectiva de la industria avícola. Lo cierto es que estas imágenes un tanto provocativas, tienen como objetivo replantear lo que asumimos como «normal» en la dieta y generar curiosidad por el veganismo como una alternativa ética y sostenible.
Desde su inicio en el año 2013, esta organización ha crecido de forma significativa y año tras año ha logrado aumentar el número de participantes en la campaña. El pasado mes de enero logró que participaran en el cambio de dieta 1’8 millones de personas de todo el mundo, además, cuentan con el apoyo de marcas y restaurantes que lanzan menús y productos veganos durante la campaña. Como novedad, Veganuary ha anunciado su intención de llegar en 2025 a países como Malasia o Perú, expandiendo aún más su mensaje.
El veganismo como filosofía y estilo de vida representa un compromiso admirable con la reducción del sufrimiento animal, el cuidado del medio ambiente y la promoción de la salud. Sin embargo, como cualquier postura ética o dietética, puede ser objeto de una crítica constructiva para fomentar el diálogo y una mayor comprensión. Lo cierto es que el veganismo en su expresión más estricta, puede ser percibido como una postura extremista, y quizá esta campaña lo sea.
Esto no significa que los principios en sí mismos sean problemáticos, sino que en ciertos contextos la implementación absoluta de sus ideales puede ignorar la complejidad de los sistemas alimentarios globales, las tradiciones culturales o las limitaciones individuales. Por ejemplo, para algunas comunidades, el acceso a alimentos veganos adecuados puede resultar limitado o muy caro. Puede causar un impacto ambiental indirecto, ya que algunos alimentos clave en una dieta vegana como los aguacates, las almendras o la soja, pueden tener un impacto ambiental significativo debido al uso intensivo del agua, por la deforestación o por las largas cadenas de transporte.
Lo cierto es que se podrían argumentar varias críticas constructivas con el fin de fomentar el diálogo y una mayor comprensión, y no es nuestra intención descalificar el veganismo, sino invitar a una postura más flexible y comprensiva que fomente la colaboración entre diferentes perspectivas. Podéis conocer todos los detalles de la campaña de este año y el reto que propone Veganuary a través de la página oficial de la organización.