Los quesos frescos son ideales para ser aromatizados con hierbas y especias y proporcionar así un sabroso sabor a nuestras elaboraciones. Ahora que es tiempo de disfrutar de platos refrescantes, es un buen momento para disfrutar de los quesos frescos, los que se elaboran a partir de leche pasteurizada, para incorporarlos en las recetas de ensaladas, sean verdes, de pasta, de pollo…
El queso fresco tipo Burgos, el queso feta o la mozzarella entre otros, aceptan todo tipo de hierbas aromáticas que engalanan su sabor. Son quesos sin corteza, que se conservan con el suero de la leche en su envase, nosotros los cortamos según el uso que le queramos dar y los bañamos en especias, hierbas y aceite de oliva virgen extra.
Si quieres preparar tu queso fresco aromatizado o marinado, sólo necesitarás un tarro de cristal esterilizado, los ingredientes y un poquito de paciencia, porque estará más bueno si lo dejas reposar al menos un día, pero nada más prepararlo tendrás la tentación de probarlo.
A lo que íbamos, el que mostramos en la siguiente imagen es mozzarella de búfala. Para el marinado hemos utilizado unas hojas de albahaca, una guindilla fresca (sin pepitas), tomates secos, pimienta de Jamaica, pimienta rosa y verde, un ajo y sal. Todo esto machacado a mano de mortero para sacar los jugos y aromas y después le hemos añadido aceite de oliva virgen extra, en esta ocasión hojiblanca.
El queso lo hemos cortado en rodajas, también podríamos cortarlo en cubitos, y lo hemos bañado con la marinada elaborada introduciéndolo en el tarro de cristal y bien cerrado, lo conservamos en el frigorífico.
En la foto que encabeza este post podéis ver el queso feta que hemos marinado con romero, hierbabuena, tomate seco, pimienta negra, shichimi y humo líquido, no le añadimos sal porque el queso ya es salado, el picante del shichimi, como siempre va al gusto y el humo líquido le proporciona un ligero sabor ahumado.
Se pueden hacer múltiples combinaciones y con distintos tipos de queso, igual de versátiles son las aplicaciones, como decíamos, en ensaladas, con unas tostadas o simplemente como aperitivo, algunos están deliciosos con anchoas por ejemplo, otros con unos tomates de verdad.
Por cierto, con el aceite que te sobre una vez consumido el queso, se elaboran unas vinagretas deliciosas. Seguramente tu también preparas quesos aromatizados, esperamos que compartas con todos tu elaboración.