Según una investigación realizada por un grupo de científicos canadienses, el queso de Yak podría ser un alimento ideal para mejorar la salud gracias al alto contenido en ácidos linoleicos conjugados que presenta. Este es un tipo de ácido graso esencial para nuestro organismo, ya que no puede ser sintetizado y por tanto es necesario que sea incluido en nuestra dieta.
Generalmente obtenemos este ácido a través de los aceites vegetales o de las grasas animales, como es en este caso. Los yaks producen el ácido en su flora gastrointestinal a partir del ácido linoleico, en experimentos previos realizados con animales se ha demostrado que este tipo de ácido promueve la mineralización de los huesos y retrasa algunas enfermedades como la esclerosis, pero además se ha demostrado que puede llegar a inhibir el cáncer.
El Yak es un tipo de bóvido nativo de las montañas de Asia central y del Himalaya, concretamente el queso utilizado en las investigaciones procede de este último lugar. Los quesos y mantequillas de Yak son productos que tradicionalmente se fabrican en aquellos lugares y son considerados de gran calidad, de hecho, este animal es uno de los más apreciados en el Tibet.
El caso es que las investigaciones realizadas muestran que la ingesta de 100 gramos diarios de este producto proporcionarían unos efectos muy saludables en nuestro organismo. Según la investigación publicada en el Journal of Agricultural and Food Chemistry, este tipo de queso sería mucho más saludable que el que se elabora con leche de cabra, oveja o vaca.
El contenido de ácido linoleico conjugado del queso de Yak llega a ser hasta cuatro veces superior que en otros quesos, algo que ha llamado la atención de los investigadores, ahora será necesario realizar nuevas líneas de investigación, por ejemplo, cruzar yaks y vacas (de hecho este cruce es viable) y obtener ejemplares que pudieran adaptarse en otros países ofreciendo leche con un alto contenido del ácido en cuestión.
Las investigaciones muestran día a día que los alimentos pueden ser uno de los remedios más efectivos para la prevención de numerosas enfermedades. Ahora podríamos citar a Hipócrates, Que la comida sea tu alimento y el alimento tu medicina.