Más que un nombre es una expresión cómo hace unos diecisiete años se bautizó un evento de repostería navideña en Cádiz, ¡Qué rico Díos mío!. Y es que los dulces tradicionales de Navidad de nuestra cultura son una verdadera delicia a la vez que ofrecen una generosa variedad para todos los gustos, polvorones, mantecados, mazapanes, turrones, barquillos, pestiños, alfajores, glorias… y aunque en los últimos años hayamos adoptado los dulces navideños de otras culturas, como el Panettone italiano o la Galette des Rois francesa, entre otros, debemos dar valor al patrimonio gastronómico que tenemos.
En estas fechas se celebran ferias gastronómicas relacionadas con los productos navideños en todo el país, hablamos de Jijona, Casinos, Avilés… hoy nos vamos hasta Cádiz para proponer la visita a la feria Qué rico Dios mío, que se celebrará del 14 al 16 de diciembre de 2012 en la Plaza España, s/n (Palacio de Diputación Provincial).
La feria se inaugurará el viernes a las 18:00 horas y estará abierta hasta las 21:30 horas, mientras que el sábado y el domingo la apertura será a las 12:00 horas, se descansará de 14:30 a 18:00 horas y se volverá a abrir hasta las 21:30 horas. Aunque el domingo se dará por clausurada la feria cuando se agoten los productos, que por lo que cuentan, parece que será a mediodía.
Y no es de extrañar, pertenece también a la tradición que los conventos de clausura elaboren dulces navideños para vender, son elaboraciones tradicionales y artesanas, con muy buena aceptación por parte de la población que en el caso de esta feria, se llevan más de 3.500 kilos de dulces elaborados por conventos de la provincia como las Agustinas Recoletas de Medina Sidonia, las Carmelitas Descalzas de Cádiz y de Sanlúcar, las Agustinas Ermitañas de Jerez…
Junto a los dulces de Navidad también ofrecen los licores con los que acompañarlos, las religiosas elaboran además el Rompope que también ofrecen en la feria, se trata de una bebida dulce que se elabora con licor, yemas de huevo, leche, almendra, vainilla, canela y azúcar.
En cualquier momento del último día los dulces de los conventos se agotarán, así que estáis a tiempo para organizaros y visitar la feria de Cádiz el viernes o el sábado para comprar los dulces que en estos momentos están elaborando las religiosas. Pero además de probar estos dulces conventuales, no dejéis de meter las manos en harina (y mucha almendra) y animaos a elaborar también vuestros dulces navideños, artesanos y naturales.
Foto | Glorias de Navidad