En las fotos podéis ver una pequeña fruta que todavía no es muy conocidas en nuestro territorio, pero no es ninguna novedad, ni tampoco ningún hibrido que se haya creado hace poco tiempo. Esta fruta se conoce principalmente como kiwi enano, kiwi baby, kiwiño, kiwäi kiwi berry, kiwi uva o kiwi cóctel, entre otros nombres. Quizá, en España, el nombre que está ganando terreno es kiwiño, es el que se le ha dado en Galicia porque es una de las zonas de producción de esta fruta. Algunas voces argumentan que, fruto de la desinformación, hay quien piensa que es un híbrido creado en esta provincia española, pero no es así.
El kiwi baby (Actinidia arguta) es el fruto de una planta perenne o vivaz, originaria de Japón, Corea, China del Norte y Extremo Oriente ruso. Según leemos aquí, fue descrita por primera vez en 1843 como Trochostigma argutum por Philipp Franz von Siebold y Joseph Gerhard Zuccarini, pero en 1867 se cambió al género Actinidia por el botánico Friedrich Anton Wilhelm Miquel.
Como podéis ver, la apariencia interior del kiwiño se asemeja a la del kiwi que todos conocemos (Actinidia deliciosa), de hecho, es de la misma familia. Es de color verde intenso y brillante, con una columnela blanca y semillas negras muy pequeñas, que apenas se aprecian en la degustación. Pero en el aspecto exterior hay mucha diferencia de una especie a otra, principalmente el tamaño, el kiwiño es como una uva grande o un tomate pera cherry, pues es una fruta pequeña y con forma ovalada que puede medir unos 2 o 3 centímetros de largo y unos 2’5 cm de diámetro en la parte más ancha.
Y otra de las grandes diferencias es la piel, que es muy fina y lisa, sin la (incómoda) vellosidad de la piel del kiwi que consideramos tradicional (el kiwi de pulpa verde, o incluso el amarillo, también conocido como kiwi gold), y como podéis ver, tiene un color verde intenso. En cuanto al sabor, el kiwiño sabe a kiwi pero, quizá, es más suave, más dulce aunque la piel amarga un poco, es super tierno y jugoso, en definitiva, es muy agradable de comer.
A todo esto, hay que decir que de esta planta trepadora o liana fructífera que da como fruto el kiwi enano (Actinidia arguta), hay distintas variedades, como la Anna o Ananasnaya’s (que se adapta muy bien al clima gallego), Issai, Ken´s Red (hay kiwi enano rojo), Geneva, Weiki, Rogow… Y parece ser que es más resistente y adaptable a distintas condiciones ambientales y diferentes climas que la planta del kiwi.
El kiwi enano se cosecha desde finales de agosto hasta principios de octubre principalmente, pero siempre puede haber algunas variedades más tempranas o más tardías. En España, además de Galicia, sabemos que se cultiva en Huelva, en su momento despertó el interés de los productores de las berries o frutos rojos, y lo sigue haciendo. Y posiblemente también se produzca en otras regiones (si tenéis conocimiento, compartidlo), pero todavía no es una fruta muy extendida en nuestro territorio.
Podría crecer en producción y así abaratarse su precio, pues como todas las frutas, ofrece beneficios a la salud, el kiwiño es rico en vitamina C, y como no hace falta pelarlo, se aprovechan más sus vitaminas, minerales, antioxidantes… Seguro que es, además, una opción que encanta a los niños por su aspecto, por su sabor y por lo fácil que es de comer. A vosotros, si lo habéis probado, ¿qué os parece?