Hace algo más de un año conocíamos la apertura en Dinamarca de Wefood, un supermercado que comercializa todo tipo de alimentos procedentes de otros supermercados convencionales, que son considerados excedentes y que acabarían irremediablemente en la basura por haber superado la fecha de consumo preferente, por estar próximos a caducar, estar mal etiquetados, tener el embalaje dañado o cualquier particularidad que provoque que los productos no cumplan los estándares de mercado. Este establecimiento fue el primero en el país en su género y posiblemente el primero del mundo en luchar contra el desperdicio alimentario con este modelo de negocio.
Pues bien, este modelo de negocio (si es que se puede llamar así), es importado por otras organizaciones humanitarias, en este caso la idea ha sido tomada por la ONG OzHarvest, que ha abierto en Australia el primer supermercado que comercializa excedentes alimentarios de otros supermercados. En este establecimiento se ofrecen tanto los alimentos que han sido donados por otros comercios o usuarios, como aquellos que han sido descartados de la venta en el comercio tradicional, pero que todavía son aptos para consumo.
OzHarvest es una organización humanitaria cuya misión es rescatar alimentos perecederos del país que pueden ser aprovechados, en algo más de 2.000 establecimientos comerciales, recoge los productos y los entrega de forma gratuita y directamente a más de 8.000 organizaciones benéficas. Fue fundada en el año 2004 y desde entonces no ha dejado de crecer y poner en marcha todo tipo de iniciativas contra el desperdicio alimentario. En el año 2005 logró que se realizaran los cambios oportunos en la legislación australiana para que se permitiera la donación de alimentos a las organizaciones benéficas sin que se les exigieran responsabilidades a quienes donaban, algo que también ha cambiado en otros países porque era uno de los principales escollos en las donaciones.
Esta organización desarrolla su actividad en base a cuatro pilares principales, recuperar alimentos, educar y concienciar a la población sobre el desperdicio de alimentos, el aprovechamiento de los alimentos, la seguridad alimentaria y la sostenibilidad, hacer participes a todas las personas para que colaboren en su actividad, e innovar buscando soluciones eficaces que puedan combatir el desperdicio alimentario y el hambre.
El supermercado OzHarvest abrió sus puertas el pasado 19 de abril y ha sido muy bien recibido por la población, en él se ofrecen muchos productos alimentarios, frutas, hortalizas, productos de panadería, conservas, comidas congeladas, bebidas, así como otros productos y artículos para el hogar. La oferta cambia constantemente y en base a lo que se rescata o recibe cada semana, el precio al que se comercializan los productos se basa en la filosofía “coge lo que necesitas y paga lo que puedas”, si algunas personas no pueden permitirse el lujo de pagar, no importa, pueden coger lo que necesitan. Todo el dinero recaudado se destina a la organización OzHarvest, para que pueda seguir con su actividad y proporcionar dos comidas diarias a los australianos que lo necesiten.
Todas las actividades son transparentes, no hay trampa ni cartón, el cometido es alimentar a los más necesitados y reducir el desperdicio alimentario, asegurando que la comida que aún es comestible pero que no se puede vender, llegue a estas personas. Uno de los principios del funcionamiento del supermercado solidario es la confianza, quien accede a este supermercado sólo debe coger lo que necesita, sin acaparar, ya que es como se puede conseguir que todo el el que lo necesita, pueda aprovechar esta comida. Una vez realizada la compra, un voluntario se encarga de ayudar a ponerla en las bolsas que los clientes han traído, si pueden realizar una donación económica, lo hacen, y si no, no pasa nada.
Toda la comida y productos expuestos, proceden de la donación realizada por supermercados, distribuidores de alimentos, panaderías, cafeterías, restaurantes u otros operadores relacionados con el mundo de la alimentación. Los productos ayudan a los australianos necesitados y las donaciones económicas recibidas sirven especialmente para ayudar a los más vulnerables, como niños y ancianos de país. La ONG comenta que tuvo la idea de abrir este supermercado, como una forma innovadora y eficaz de redistribuir la comida y obtener unos ingresos necesarios para seguir su actividad en otras acciones humanitarias.
OzHarvest comenta que para poner en marcha este modelo de negocio se inspiró en Wefood, el primer supermercado de excedentes alimentarios del mundo, que como ya hemos explicado, abrió sus puertas en Dinamarca en 2016. Cada vez aparecen más iniciativas que tienen la finalidad de aportar su granito de arena en la lucha contra el desperdicio alimentario, durante estos últimos años hemos hablado en el blog de muchas de estas iniciativas cuya labor es loable y merece ser destacadas y reconocida. Podéis conocer más detalles de este particular supermercado a través de la página oficial de la organización humanitaria.
