Hay muchas recetas tradicionales con berenjenas en las que esta hortaliza se guisa en un medio graso, generalmente aceite de oliva, y ya sabéis que las berenjenas son como una esponja, tienen mucha capacidad para absorber la grasa en la que se cocinan. Esto se puede ver en positivo y en negativo, en el primer caso porque el resultado es un bocado delicioso y muy sabroso, con unas cualidades organolépticas que seducen, y la parte negativa es que al aumentar el contenido en grasas de las berenjenas, deja de ser un alimento tan saludable y ligero, de tener apenas 25-30 kilocalorías por 100 gramos puede pasar a tener unas 150 kilocalorías.
La estructura de la berenjena es de una pulpa o carne llena de bolsas de aire muy pequeñas que al cocinarse se cierran. Si se están cocinando en aceite, aunque sea muy poco, estas bolsitas de aire lo absorben todo, seguro que lo habéis experimentado más de una vez en vuestra cocina, y al añadir más aceite y lo vuelve a absorber. Al final quedan unas berenjenas con mucha grasa, pero esto no siempre quiere decir que resulten desagradables de comer, ya sabéis que las grasas son un buen conductor del sabor, de hecho, se considera el sexto sabor y tienen otros atributos sensoriales.
El caso es que sobre cómo cocinar las berenjenas con menos grasas os hablamos hace ya tiempo en este post, pero hoy vamos a abordar este tema desde el lado más práctico, pues os vamos a mostrar cómo precocinar la berenjena para hacer platos más saludables y ligeros. Partimos de lo que antes hemos comentado, al cocinar las berenjenas sus bolsitas de aire se cierran, así que si se cocinan sin ninguna grasa ni líquido, se cerrarán sin absorber nada. Después, se podrán sofreír, rehogar, saltear… y como su estructura cavernosa está colapsada, apenas absorberá grasa.
Y conseguir esto es muy fácil, además, precocinar las berenjenas nos puede ahorrar tiempo en la elaboración de una receta, ¿cómo lo hacemos? Pues cocinando las berenjenas en el microondas, donde se pueden hacer al vapor en menos de diez minutos y no quedan resecas, quedan tiernas y jugosas, listas para continuar con la receta y con la consecución de un plato equilibrado, sin exceso de grasas.
¿Cómo precocinar las berenjenas en el microondas para que absorban menos grasas?
Para hacer recetas con berenjenas como un pisto, chanfaina, ratatouille, caponata… debemos cortar las berenjenas en dados, después de haberlas lavado bien. Dicho sea de paso que el mismo procedimiento se puede realizar si se van a cocinar las berenjenas en rodajas o en bastones.
Una vez que las berenjenas están cortadas, las colocamos en un estuche de silicona para cocinar al vapor en el microondas (como este), o en otro recipiente que cumpla la misma función, puede ser un bol con su tapa, por ejemplo. A continuación las llevamos al microondas y programamos unos 8 minutos a 800-1.000 vatios. El tiempo no es exacto, puede variar según la cantidad de berenjenas que se hagan, y también de cómo nos gusten las berenjenas o el punto de cocción que se quiera conseguir teniendo en cuenta que después se continuarán cocinando en un sofrito, en una salsa…
Al retirar las berenjenas del microondas comprobaréis que los dados se han encogido, sus bolsas de aire se han cerrado, pero la pulpa se mantiene blanca, tierna e hidratada, jugosa. Y esta precocción de las berenjenas también puede ser una cocción completa, es decir, que están listas para servir, podéis aderezarlas al gusto con una vinagreta, especias o salsas, y pueden ser un entrante o guarnición nutritivo, saludable, ligero y delicioso. Probadlo, veréis que cocinar las berenjenas en el microondas es una muy buena opción para conseguir un plato rico, ahorrando tiempo y recursos energéticos.