Si queréis disfrutar de una pizza deliciosa en casa, os recomendamos tomar nota de la receta que os dejamos a continuación, incluye la masa de la pizza, que es una de las más fáciles de hacer y sabrosas, especialmente ideal para quienes les gusta la masa fina y crujiente, pero apta para todos los gustos. La masa de pizza se puede hacer en amasadora o robot de cocina, como Thermomix, y se tarda menos de 10 minutos, y si se hace a mano sale igual de buena aunque se tarda un poco más en hacer, pero en unos 15 minutos puede estar lista.
Así que tomad nota de la elaboración paso a paso de nuestra Pizza bianca con jamón ibérico, trufa negra y parmesano, la receta de una pizza de lujo para disfrutar en casa. Hay que aprovechar que estamos en temporada de trufa negra e incorporarla en los platos en los que puede dar tanto juego como este. Y si os gusta el jamón de bellota (o la paleta), veréis qué delicia en combinación con el resto de ingredientes, y no se estropeará porque no se va a hornear.
Como veréis en la receta, preparamos una pizza blanca porque nos parece que el tomate se apodera demasiado del sabor global, pero quien no conciba una pizza sin tomate, que la haga a su gusto, quizá más que tomate frito, podría poner tomate natural, por ejemplo, unas finísimas rodajas de tomate bajo la cebolla. Sal no hace falta añadir, entre la que lleva la masa, el jamón y el queso, es más que suficiente. Y podríamos seguir hablando sobre lo deliciosa que resulta esta pizza casera con jamón ibérico y trufa negra (Tuber melanosporum), entre otras cosas, pero lo mejor es que os dejéis tentar, preparad todo para hacer la pizza este fin de semana. Quizá la trufa negra no sabéis dónde comprarla, nosotros tenemos un proveedor de la zona, podéis consultarle a través de su página.
Ingredientes (4 comensales)
Para la masa de pizza
- 500 gramos de harina de media fuerza o de fuerza
- 10 gramos de levadura fresca de panadero
- 220-280 gramos de agua con gas
- 8 gramos de sal
- 25 gramos de aceite de oliva virgen extra
- 1 c/c de azúcar.
Para la pizza
- 4 c/s de aceite de oliva virgen extra
- 1 cebolla tierna
- 200 gramos de mozzarella rallada
- 140 gramos de jamón o paleta de bellota 100% ibérica
- 1 puñado de brotes de espinacas rojas
- 60-80 gramos de queso parmesano
- c/n de trufa negra (Tuber melanosporum).
Elaboración
Para la masa de pizza
Disuelve la levadura fresca en un poco del agua templada (no caliente). Pon en la amasadora todos los ingredientes y amasa durante seis minutos. Si no tienes amasadora, haz un volcán con la harina dentro de un bol y pon el resto de ingredientes en el agujero. Mezcla poco a poco con una rasqueta de panadero o con la mano, y cuando todos los ingredientes estén integrados, pasa la masa a la mesa de trabajo ligeramente enharinada, amasa hasta obtener una masa homogénea y elástica.
Forma una bola con la masa y ponla en un bol cubierto con un trapo y deja levar a temperatura ambiente, en un lugar sin corrientes de aire, al menos dos horas, pero si puedes dejarla seis u ocho horas, mejor. Antes de hacer las pizzas, divide la masa en cuatro porciones cortándola con la rasqueta de panadero.
Forma una bola con cada masa y deja reposar cinco o diez minutos antes de estirar cada una con el rodillo, pues así perderá tensión y será más fácil. Mientras vas dando forma a la masa, si al principio cuesta porque se encoje, deja reposar esa porción y trabaja otra porción que esté menos tensa.
Para la pizza
Prepara el topping de la pizza, pela la cebolla y córtala fina con ayuda de una mandolina o con un cuchillo bien afilado. Deja la paleta (o el jamón) a temperatura ambiente, lava y seca los brotes de espinacas y corta el queso parmesano en lascas con la mandolina o con un pelador de verduras.
Como comentábamos, esta pizza se puede hacer con base de tomate si se desea, en caso de hacer la pizza blanca, primero aderézala con un chorrito de aceite de oliva virgen extra (puede ser aceite ahumado o de otro sabor, si se desea) y repártelo bien con ayuda de una brocha de cocina. A continuación reparte la cebolla y después la mozzarella rallada.
Hornea las pizzas con esta primera cobertura en el horno a 220º C con calor arriba y abajo, hasta que la masa esté dorada al gusto, es una masa crujiente si se estira bien fina y se hornea a elevada temperatura, a quien le guste más esponjosa o más blandita, habrá que hacerle la masa menos fina y poco dorada.
Retira la pizza del horno y reparte la paleta o jamón ibérico, las hojas de espinacas rojas y el queso parmesano, introduce de nuevo en el horno, no más de un minuto, y retira. Lamina la trufa negra con ayuda de una mandolina o laminador de trufas y repártela sobre la pizza bien caliente.
Acabado y presentación
Sirve la pizza blanca de jamón ibérico, trufa negra y parmesano recién hecha, el aroma seducirá desde que llega a la mesa, y el sabor será tan rico, que en cada bocado se estará pensando lo mismo, ‘que no se acabe, que no se acabe’. ¡Buen provecho!
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria