La Fundación Alícia nos ofrece una pirámide nutricional de cuatro caras, una herramienta diseñada para ayudar a entender qué es necesario comer, cómo se ha de comer, cómo cocinar los alimentos y con qué frecuencia, y a la vez recordar que para disfrutar de una buena salud también es muy importante moverse. Este calendario ha sido desarrollado por un equipo multidisciplinar formado por diferentes expertos de gestión cotidiana de la alimentación, ahora se ofrece esta herramienta de forma gratuita a todas aquellas personas que quieran mejorar su alimentación y salud.
La pirámide nutricional de la Fundación Alícia se presenta con ilustraciones sencillas y fáciles de entender, detrás de cada cara encontramos una pequeña descripción sobre lo que podemos ver. En la cara ‘Qué comes’ nos muestra lo que nos conviene para alimentarnos correctamente y de acuerdo a nuestro entorno, en su base podemos encontrar lo que tenemos que comer más a menudo, a medida que subimos de altura (la pirámide se estrecha) se muestran aquellos productos que se tienen que comer con menos frecuencia o en menos cantidad. Coronando esta cara de la pirámide aparecen los alimentos que se han de consumir de forma esporádica, se puede apreciar que esta pirámide está relacionada con la pirámide de la Dieta Mediterránea.
La segunda cara titulada ‘Cómo cocinas’ muestra cómo se cocinan los alimentos, en el horno, fritos, hervidos, etc. La dinámica es la misma, en la parte más baja aparecen los métodos de preparación y cocción que pueden utilizarse a menudo, a medida que se va subiendo los métodos de cocción que aparecen deben utilizarse con menos frecuencia. Encumbrando esta cara de la pirámide aparecen los fritos. Un ingrediente como la patata se recomienda de forma habitual hervida, al horno o en puré, siempre y cuando no incluya mantequilla, en cambio, si son fritas, pasan a la zona más alta de la pirámide.
La tercera cara nos informa sobre ‘Cómo debemos comer’, el tiempo es un factor muy importante y en esta cara se recomienda la compañía como una forma de prolongar un poco más el tiempo que se dedica a comer, también se aconseja evitar elementos de distracción como por ejemplo la televisión. Se recomienda disfrutar alimentos de temporada y tener en cuenta tanto la tradición como las ganas de probar nuevos alimentos, finalmente se insta a disfrutar de cada bocado por muy sencilla que sea la comida. Recordemos que comer despacio nos ayuda a que la cantidad de comida que ingerimos sea la justa y necesaria para saciar nuestro apetito, además es mucho mejor para poder asimilar todos los nutrientes que aportan los alimentos, se facilita la digestión y se evitan futuros problemas de salud gastrointestinal.
La última cara de la pirámide nutricional ofrece información sobre la actividad física recomendable, hacer ejercicio de forma regular ayuda a mejorar la salud y equilibrar las reservas energéticas según la alimentación, de este modo se evitan problemas como el sobrepeso o la obesidad. El ejercicio debe realizarse de forma acorde a la edad y la capacidad, en la parte más baja encontramos actividades cotidianas como subir escaleras, caminar o pasear, etc. En zonas superiores encontramos actividades físicas que requieren un mayor gasto energético, evidentemente la zona inferior de esta cara de la pirámide señala aquellas actividades que no requieren esfuerzo y que están asociadas al sedentarismo.
Si os interesa, podéis descargar la pirámide nutricional de cuatro caras de la Fundación Alícia a través de este enlace (Pdf), posteriormente sólo será necesario imprimirla, recortarla y montarla.