Los Pastelitos de chocolate con arroz inflado son un dulce ideal para quien no quiere resistirse a un capricho en algún momento del día, sin incorporar demasiadas grasas, como veréis, no llevan mantequilla, se utiliza poco aceite y los huevos son un excelente alimento. Además de sabrosos son ligeros y esponjosos, con un toque crujiente que encantará a grandes y pequeños.
El suero de mantequilla con el que se elaboran estos Pastelitos de chocolate con arroz inflado es fácil de encontrar en grandes superficies, pero también podéis obtenerlo a partir de la nata, elaborando mantequilla casera. Esperamos tentaros con esta receta y agasajéis a vuestros invitados con repostería casera, les encantará la receta.
Ingredientes (18 uds.)
- 225 gramos de harina
- 60 gramos de cacao en polvo
- 8 gramos de levadura en polvo tipo Royal
- 125 gramos de azúcar
- 250 gramos de suero de mantequilla
- 30 gramos de aceite de girasol
- esencia de vainilla (cantidad según el tipo que se utilice, su intensidad)
- 2 huevos XL
- 150 gramos de bolitas de arroz bañadas en chocolate
- una pizca de sal.
Elaboración
Tamiza la harina con el cacao en polvo y la levadura, pon esta mezcla en un bol amplio, añade el azúcar y la pizca de sal y mezcla bien.
En otro recipiente mezcla el suero de mantequilla, el aceite, los huevos y la esencia de vainilla, bate bien hasta que todos los ingredientes estén bien integrados. Vierte esta mezcla en el bol de la harina y mezcla con las varillas hasta obtener una masa homogénea.
Déjala reposar en el frigorífico unos 30 minutos, mientras precalientas el horno a 200º C con calor arriba y abajo. Al retirar la masa de los pastelitos del horno, incorpora las bolitas de arroz bañadas en chocolate, mezcla bien y reparte la masa en los moldes de silicona (o en otros que sean antiadherentes, si es necesario engrásalos ligeramente), dejando aproximadamente un dedo sin llenar para darle espacio cuando suban en el horno.
Hornea los pastelitos de chocolate con arroz inflado (el chocolate se integrará en la masa y el arroz permanecerá crujiente) durante 30 minutos o hasta que al pinchar con un palillo, éste salga limpio.
Deja enfriar antes de desmoldar los pastelitos y consérvalos en un tarro o recipiente tapado, disponiendo de un desayuno o snack dulce casero en cualquier momento. ¡Buen provecho!