Nadie puede resistirse ante un plato de pasta con tomate frito, sobre todo si la salsa de tomate es casera y hecha con mucho mimo. Pero en verano apetecen más los platos fríos, y la Pasta con salmorejo podría decirse que es la versión fresca de un buen plato de pasta con tomate. De igual modo, la versatilidad de este plato es enorme, hoy le hemos añadido berenjenas, pero también puedes añadir otros ingredientes que pondrías a una ensalada de pasta.
La receta de Pasta con salmorejo es además un plato muy sano, vegetales, carbohidratos y un poco de queso que aporta proteínas. Si lo pruebas, seguro que te encantará. Puedes hacer el salmorejo que normalmente haces, nosotros en esta ocasión hemos hecho una mezcla entre el salmorejo y el gazpacho tradicional, es la versión que más nos gusta, no añadimos pan pero tampoco agua.
Ingredientes (4 comensales)
- 350 gramos de pasta
- 1 berenjena grande
- 350 gramos de tomates pera
- ½ pepino
- ½ pimiento verde
- ½ cebolla
- 1 diente de ajo pequeño
- queso curado
- aceite de oliva virgen extra
- sal.
Elaboración
Prepara el salmorejo como más te guste o esta versión en la que incorporamos pimiento, pepino y cebolla como en el gazpacho, es decir, tritura los tomates, el pepino, el pimiento, la cebolla, el ajo, sal al gusto (una cucharadita pequeña) y dos o tres cucharadas grandes de aceite de oliva, hasta obtener una crema densa. Como va a acompañar a la pasta, no creemos conveniente añadirle pan. Reserva en el frigorífico hasta el momento de servir.
Lava la berenjena y córtala en rodajas y después corta las rodajas por la mitad. Sálalas por los dos lados y déjalas reposar en un colador o sobre papel de cocina absorbente hasta que suelten el agua, entonces sécalas bien y hazlas a la plancha. Nosotros hemos elegido un poco de aceite picante para hacerlas.
Cuece la pasta en abundante agua salada como haces normalmente. Cuando esté en su punto, viértela sobre un colador grande y refréscala bajo el chorro de agua fría.
Emplatado
Sirve la pasta con las berenjenas en los platos y báñala con el salmorejo, finalmente añade unas escamas o finas lonchas troceadas de queso curado. ¡Buen provecho!