La Panzanella es un plato tradicional de la Toscana, muy popular también en Lazio, Marche y Umbria, y conocido internacionalmente. Su ingrediente principal es el pan, siendo además un plato muy básico y simple que con el tiempo se ha ido enriqueciendo al incorporarse nuevos ingredientes. La base de la panzanella la forma el pan duro, acompañado de cebolla, albahaca y aderezado con aceite de oliva, vinagre y sal.
Este plato se presenta como una ensalada añadiéndole todo tipo de ingredientes, tomates, pimientos, ajos, aceitunas, pepino, espárragos, queso mozzarella, anchoas, alcaparras… ya no sería la tradicional Panzanella, también conocida como Panmolle, pero se conserva su esencia, principalmente la de usar un buen pan elaborado con masa madre, un pan rústico o pan de pueblo con mucha miga, a menudo se le retira la corteza para la elaboración de este plato.
Originariamente el pan duro se ponía en remojo para hidratarlo y que estuviera jugoso en su degustación, esto también se ha variado en muchas cocinas, a veces se hace tostado, otras veces frito… Es un plato de verano que se debe servir frío, es decir, una vez preparado se deja reposar en el frigorífico antes de servirlo.
Es fácil deducir que la Panzanella surgió como aprovechamiento del pan, un contundente plato que ayudaba a recuperar energía a los campesinos. Según la región, y los cocineros, al poner el pan en remojo y después escurrirlo, el servicio de este podía ser medio desmigado o en trozos más grandes. Como hoy se cuida mucho la estética de los platos, es más habitual encontrar esta nutritiva ensalada con los trozos de pan empapados de su aderezo, y para muchos resulta más agradable si se ha secado bien, si se ha tostado y conservan algunos trozos una textura crujiente.
Comemos con los ojos, pero también con el paladar, así que la libertad para elegir los ingredientes que compongan una panzanella y el modo de prepararlos y servirlos, está hoy en manos de todos. No habrá quien pueda resistirse a esta refrescante ensalada, pudiendo ser un plato apto para quienes llevan una dieta vegetariana, y pudiendo adecuarlo a una dieta sin gluten utilizando el pan apropiado.
Seguro que muchos de vosotros tenéis vuestra combinación ideal para la panzanella, nos encantaría conocerla. Normalmente nosotros la variamos bastante, a razón de lo que tenemos en la despensa, las verduras de temporada… pero siempre partiendo de un buen pan (no retiramos la corteza, nos gusta la textura que aporta y su sabor, y muchas veces lo enriquecemos untándole ajo después de tostarlo ligeramente), cebolla morada y albahaca fresca, a ser posible de nuestro propio cultivo.
Si no habéis preparado hasta ahora una panzanella o panmolle, este es un buen momento de ello, podeis probar esta receta de panzanella. Ya nos contaréis que seguramente la vais a repetir.
Foto | FootosVanRobin