A muchos nos puede sorprender que a día de hoy se presente el pan con sal yodada como novedad. Según vemos en el vídeo publicado en PúblicoTV, con la barra de pan Campesina Yodada que Berlys acaba de presentar, es la primera vez que la industria incluye sal yodada en el pan, siendo la mayor innovación realizada en este sector en los últimos 20 años.
La Campesina Yodada es una variedad de pan rústico al que se le ha añadido sal con yodo en lugar de sal común refinada, como suele ser habitual en la industria alimentaria, convirtiendo así a este pan con sal yodada en un alimento funcional. Anuncian que es el primer pan del mercado español con estos beneficios para la salud.
Recordemos que recientemente hablábamos de la sal yodada en Gastronomía & Cía a raíz de la noticia de que hay muchos hogares que prescinden de su uso en la cocina y por lo tanto no aportan este mineral en cantidades suficientes a su organismo. Ya sabemos que un déficit de yodo puede provocar distintos trastornos como el bocio, problemas de tiroides, etc. La OMS recomienda que consumamos sal yodada como única forma de obtener la cantidad necesaria de este micronutriente esencial.
Son los niños y las mujeres embarazadas o en época de lactancia los que más riesgos tienen de sufrir un Trastorno por Déficit de Yodo (TDY), pues de los 150-200 microgramos de yodo necesarios en los adultos, la población infantil y las futuras mamás o madres lactantes ven aumentadas sus necesidades en unos 25-50 microgramos.
Los que somos aficionados panaderos llevamos ventaja a la industria panadera en la elaboración de pan con yodo, tenemos muy fácil disfrutar a diario de un pan funcional, nosotros siempre hemos utilizado la sal yodada para la elaboración de pan en casa. Nos cuesta entender que siendo la sal yodada tan fácil de obtener y de incluir en la producción o elaboración de alimentos, después de tantas recomendaciones y alertas de la Organización Mundial de la Salud y de otras entidades sobre los riesgos de salud en caso de déficit de yodo, de tanto protagonismo a todos los que dicen fomentar la alimentación equilibrada y saludable, que todavía no se haya obligado (ni a los fabricantes se les ha ocurrido voluntariamente) a la industria a elaborar sus productos con un ingrediente tan sencillo como la sal yodada, y no ha sido por falta de imaginación, en Estados Unidos hace tiempo que es obligatorio, y en Nueva Zelanda también se aprobó un proyecto de Ley el año pasado, los panaderos están obligados a elaborar pan fortificado con yodo, igual que en Suiza, Holanda y Dinamarca.
Si es cierto que Berlys es la primera empresa de alimentación nacional que incluye sal yodada en el pan, es para agradecérselo, como mínimo servirá para que los que compran su pan se beneficien de la nueva fórmula y para que le salga competencia. ¿Harán finalmente que sea obligatorio el uso de sal yodada en la industria?