COAG (Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos) ha publicado el IPOD (Índice de Precios de Origen y Destino de los alimentos) correspondiente al pasado mes de mayo y de nuevo, y por séptimo mes consecutivo, los limones encabezan la clasificación de los alimentos con mayores diferencias de precio entre lo que se paga a los agricultores y lo que los consumidores pagamos en el mercado.
Según sus datos, en el mes de mayo pagamos más de ocho veces el valor de los limones en el campo y de nuevo se ha acortado la diferencia respecto a meses anteriores, pero sigue siendo una diferencia especulativa y sin sentido. Basta con decir que la campaña de los limones de este año se considera la peor de la historia, hasta el punto de que los agricultores han dejado de recoger miles y miles de kilos de este cítrico porque recogerlos es perder dinero, como ha sucedido tantas veces con las naranjas.
El sector citrícola sufre las consecuencias de un mercado muy especulativo, del enorme volumen de importaciones de limones de terceros países que hunden los precios de mercado nacionales y europeos y, además, del cambio climático, las plagas y las enfermedades. No es extraño que cada vez más citricultores abandonan las cosechas de esta temporada e incluso se planteen un abandono de forma definitiva.
Según el IPOD, la diferencia porcentual origen/destino de los limones se situó en un 759%. En el campo, el kilo de esta fruta se cotizó a una media de 0’22 euros (tres céntimos más que en el mes de abril), y en el mercado el precio de venta se mantuvo en 1’89 euros por kilo. Estos datos reflejan que en la trayectoria del campo a la mesa el precio del limón se multiplicó 8’59 veces.
En segundo lugar en este particular “ranking de las diferencias especulativas de precio” se clasifican los tomates de ensalada con una diferencia porcentual origen/destino del 659% (10 décimas menos que en abril). En el campo, el kilo de tomates de ensalada se cotizó a una media de 0’29 euros, manteniéndose el precio del mes anterior, mientras que en el mercado el precio medio fue de 2’20 euros por kilo, lo que supone una reducción de 3 céntimos respecto a los datos del IPOD del mes de abril. Aunque las cifras se han moderado, sigue siendo una diferencia muy elevada, ya que en el trayecto del campo a la mesa el precio de los tomates se multiplicó 7’59 veces.
En tercer lugar se colocan las cebollas con una diferencia porcentual origen/destino del 648%, lo que supone un incremento de 95 décimas sobre la diferencia del mes de abril. En origen, el kilo de cebollas se cotizó a una media de 0’25 euros, es decir, 7 céntimos menos que en el mes de abril, y en el mercado el precio medio se estableció en 1’87 euros, lo que supone una bajada de 22 céntimos. A pesar de que se ha reducido el precio en el mercado, los datos reflejan que en el trayecto del campo a la mesa las cebollas multiplicaron el precio base 4’48 veces.
El último producto que supera la barrera imaginaria del 500% entre el precio del campo y el del mercado es la naranja, cuya diferencia porcentual origen/destino en el mes de mayo fue de 561%, lo que supone una reducción de 127 décimas sobre los datos del mes de abril. En el campo, el precio medio de las naranjas se incrementó hasta situarse en los 0’31 euros por kilo (5 céntimos más que en abril) y en el mercado, el precio medio de venta se mantuvo nuevamente en 2’05 euros. Los datos muestran que en la trayectoria del campo a la mesa el precio de esta fruta se multiplicó por 6’61 veces, otro claro ejemplo de especulación con el precio de los alimentos.
En el IPOD de mayo de 2024 se destacan otros alimentos como las acelgas o las lechugas, aunque no superan la barrera del 500% de diferencia, es probable que esta se incremente en el próximo indicador, recordemos que es en verano cuando más se consumen alimentos como la lechuga. A través de la página oficial de COAG podréis conocer más detalles del Índice de Precios de Origen y Destino de los alimentos de mayo de 2024.
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