La sandía es una de las frutas estrella del verano, es la que más refresca porque es la que más agua contiene, además ofrece un sabor dulce único que no suele tener detractores. Como postre, parte del desayuno o de la merienda, o como tentempié para refrescarse en verano, la sandía es un buen alimento, y cada cual se la prepara a su gusto para consumirla, en una tajada y a bocados, en tajadas pequeñas de dos bocados, en dados de un bocado…
En Gastronomía y Cía hemos compartido varios vídeos sobre cómo pelar y cortar una sandía, pues es una fruta muy voluminosa y a los más jóvenes puede parecerles un engorro prepararla. Para que eso no sea una excusa que excluya de la alimentación en verano esta fruta, hoy tenemos otro vídeo que muestra otra forma de cortar sandía en dados.
Antes de ver el vídeo os recordamos los que ya hemos visto por si se os han escapado, pues son de veranos anteriores, por ejemplo Cómo cortar sandía en cubos, Cómo pelar una sandía para cortarla sin su cáscara, y como curiosidad más que para ponerlo en práctica, cómo pelar una sandía en menos de 15 segundos.
Dependiendo de cuántos miembros componen una familia, y por supuesto, de cuánta sandía se consuma, esta fruta se puede comprar entera, media pieza o un cuarto. Años atrás esto no se veía mucho, lo que se hacía en el mercado era que el frutero ‘calaba’ la sandía para probarla antes de comprarla. En la frutería que solemos comprar ahora esto no se suele hacer, ahora lo más habitual es comprar media o un cuarto de sandía y se prueba con los ojos, es decir, por el aspecto. La razón es bien simple y seguro que sobran explicaciones, y es que el número medio de miembros del hogar ha disminuido considerablemente en los últimos años.
Pero vamos a lo que nos ha traído a hablar del consumo de sandía, el vídeo en el que se puede contemplar otra forma de cortar sandía en cubos fácilmente, para lo que basta con tener un cuarto de una pieza de fruta.
En primer lugar hay que elegir un buen cuchillo, que sea largo y esté bien afilado, a continuación se procede a cortar colocando la hoja de forma paralela al corte de la fruta, es decir, en ángulo, con la punta del cuchillo se debe llegar a la piel. Después hay que continuar realizando cortes paralelos y por debajo del primero.
Después hay que hacer lo mismo desde el otro lado de la sandía, y para terminar se realizan cortes paralelos en vertical a lo largo de toda la pieza. A continuación basta con volcar la fruta sobre un cuenco para que caigan los dados de sandía, y aunque Justin Chapple no lo haga, vosotros no dejéis pegada a la piel tanta pulpa.
Foto | Jeff Potter