El origen de la tortilla de patatas podría estar en Extremadura, concretamente en la localidad de Villanueva de la Serena, así lo afirma Javier López Linage, investigador del Centro de Ciencias Humanas y Sociales del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas). El nuevo dato aparecerá en una publicación que editará el Ministerio de Medio Rural, Medio Ambiente y Medio Marino y que tratará sobre la historia española de la patata.
El trabajo de investigación realizado por Javier López Linage muestra que la historia de la tortilla de patatas se remonta al siglo XVIII y no al siglo XIX como se evidenciaba en algunos documentos (aunque la diferencia radica sólo en un par de décadas), como por ejemplo el documento anónimo «memorial de ratonera», documento que se dirigía a las Cortes de Navarra explicando la precaria situación en la que se encontraban los agricultores con respecto a la alimentación.
Un párrafo en concreto relacionaba la aparición de la tortilla de patatas con esta comunidad, «…dos o tres huevos en tortilla para cinco o seis, porque nuestras mujeres la saben hacer grande y gorda con pocos huevos mezclando patatas, atapurres de pan u otra cosa…».
Son muchas las leyendas, historias y teorías que han colocado la tortilla de patatas en el siglo XIX. Se creía que la tortilla de patatas comenzó a difundirse en las Guerras Carlistas, otros indicaban que fue un ama de casa quien la invento y ofreció al general Tomás de Zumalacárregui, quien utilizaría la receta posteriormente para alimentar a sus tropas. Lo cierto es que casi todas las leyendas y teorías giran en torno a las Guerras Carlistas.
Ahora sabemos al menos que el origen de la tortilla de patatas se remonta un poco más atrás en el tiempo, a finales del siglo XVIII. Las fuentes documentales consultadas por el investigador parecen ser la prueba. El investigador referencia a Joseph de Tena Godoy y Malfeyto, marqués de Robledo, ambos buscaban un alimento que fuera nutritivo y barato para luchar contra las hambrunas que se encontraban establecidas a finales del siglo XVIII en Europa. Parece ser que inventaron una especie de tortitas que no se horneaban y debían pasarse por la sartén.
Según el investigador, estas tortitas serían en realidad las primeras tortillas de patatas, a diferencia de otras teorías, los datos aportados en el documento de Villanueva de la Serena del año 1798 son una prueba irrefutable. El investigador no ha proporcionado más información, algo que nos hace tener un especial interés por ampliar nuestra cultura gastronómica y leer la publicación que editará el Ministerio de Medio Rural, Medio Ambiente y Medio Marino en el momento de su aparición.