A principios del año pasado hablábamos de OpenFoodTox, una herramienta presentada por la EFSA (Agencia de Seguridad Alimentaria de la Unión Europea) cuyo cometido es proporcionar información sobre los riesgos químicos presentes en los alimentos destinados al consumo humano y animal de un modo rápido y sencillo. Esta base de datos formaba parte de la estrategia de la EFSA para facilitar que todo el mundo tuviera acceso a la información de las investigaciones relacionadas con los riesgos químicos presentes en la cadena alimentaria.
La base de datos OpenFoodTox inició su andadura con 4.429 sustancias químicas presentes en 1.600 estudios realizados por la agencia, y ahora, OpenFoodTox se actualiza y ofrece información sobre más de 4.750 sustancias químicas presentes en los alimentos. La base de datos se ha incrementado con la inclusión de 321 nuevas sustancias asociadas a riesgos químicos presentes en la cadena alimentaria humana y animal. Además, se ha mejorado la interface y ofrece más funciones para explorar todos los datos que proporciona, los usuarios podrán encontrar información relacionada con la legislación comunitaria, los niveles de seguridad establecidos para cada una de las sustancias, la ingesta diaria máxima tolerable o aceptable, etc.
Los datos de la nueva actualización se han obtenido a partir de los resultados de 132 evaluaciones adicionales realizadas por la EFSA en diferentes áreas, ingredientes alimentarios, aditivos para piensos, contaminantes y pesticidas, entre otros. Además, integra más de 1.816 valores de orientación basados en la salud, es decir, ingestas diarias aceptables y tolerables. La información que proporciona OpenFoodTox son los datos toxicológicos resumidos que suele utilizar la EFSA para el establecimiento de los niveles seguros de las sustancias químicas en alimentos humanos y animales, así como las sustancias químicas presentes en el medioambiente desde la creación de la agencia en el año 2002.
Como ya comentamos en su momento, es una base de datos que resultará especialmente interesante para ser consultada por agencias reguladoras e investigadores, y así poder contar con información clave y de relevancia sobre la toxicidad de determinadas sustancias que están presentes en los alimentos. También resultará útil para los consumidores que tienen inquietud por ampliar sus conocimientos sobre las evaluaciones de seguridad que la EFSA realiza en relación a las sustancias químicas que están integradas en los productos de consumo.
Esta es la primera actualización realizada desde que se lanzó OpenFoodTox, y la agencia espera poder actualizar esta herramienta al menos una vez cada año, aunque, de momento, no se ha incluido información adicional sobre las propiedades de las sustancias químicas toxicocinéticas, es decir, el conjunto de fenómenos que experimenta la sustancia química desde que entra en el organismo de un ser humano o un animal, hasta que se elimina, quizá para la próxima actualización. Esta información sobre las propiedades de las sustancias químicas toxicocinéticas, será especialmente interesante, ya que con ella se podrán desarrollar modelos informáticos capaces de prevenir la toxicidad química, evitando así la experimentación con animales.
Otra opción de la que se habló en el lanzamiento de OpenFoodTox, fue lanzar una aplicación móvil, un recurso que parece que tardará bastante en presentarse y del que la agencia no ha proporcionado ninguna información en su comunicado de prensa. Si estáis interesados en conocer cómo funciona la herramienta y ampliar conocimientos sobre los riesgos químicos presentes en los alimentos, os recomendamos acceder a través de este enlace.
Foto 1 | Michael Stern