Distintos estudios científicos se han centrado en un nuevo ingrediente alimentario, la Okara, un derivado de la soja que se obtiene a partir de los residuos generados en la elaboración del tofu o la bebida de soja entre otros. La Okara es una pasta de color blanca que presenta un sabor un tanto neutro y que es utilizada sobre todo en la elaboración de guisos, pan o productos de pastelería en los países asiáticos.
Sus características nutricionales resultan interesantes y por ello es un alimento adecuado para ser incluido en las dietas. La Okara contiene un 24% de proteína que representa un 17% del contenido proteínico de la soja, es rica en calcio, hierro y riboflavina, elemento también conocido como vitamina B2, con un papel muy importante para la salud, ya que interviene en numerosos procesos celulares. Presenta un alto contenido en isoflavonas de soja y un alto contenido en fibra insoluble, fibra que mejora el tránsito intestinal.
La mayor parte de la producción de Okara se destina a la alimentación animal porque, de momento, no es un alimento muy demandado por los seres humanos, de ahí que en muchas ocasiones, en los países asiáticos, las fábricas que elaboran tofu o leche de soja se encuentran cerca de una granja animal.
En los países occidentales la Okara se destina habitualmente a la alimentación en las granjas de cerdos y ganado en general, pero una parte se destina a la elaboración de hamburguesas vegetarianas similares a las hamburguesas de soja. Sin embargo, como hemos dicho antes, los estudios realizados sobre las características y propiedades que presenta este derivado de la soja hacen que se tenga más consideración con este ingrediente alimentario.
Los últimos trabajos realizados por el Grupo de Investigación de Productos Bioactivos del Departamento de Biología y Química de la Universidad de Hong Kong (China), han desvelado el contenido real de nutrientes de la Okara y se han destacado algunas propiedades específicas que presenta en la elaboración de algunos de los alimentos que antes hemos mencionado. La Okara añadida a la masa del pan permite que aumente su volumen, es un aporte extra en fibra y contribuye a reducir el contenido calórico de algunos alimentos como por ejemplo los productos de bollería.
Se han realizado diversas pruebas con este ingrediente alimentario obteniendo resultados muy satisfactorios, por ejemplo, en la elaboración de aperitivos o snacks, logrando que ofrezcan un mayor aporte nutricional y con un sabor similar a los aperitivos y snacks tradicionales. Se ha tenido en cuenta la utilización de la Okara como un alimento funcional ideal para controlar los niveles de colesterol, mejorar la absorción de calcio o regular el aumento de peso. Es interesante dar un vistazo a la información que nos proporciona el Instituto del Frio del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas) sobre la Okara.
Es evidente que resulta interesante incluir este derivado de la soja en la dieta, aunque tenemos nuestras dudas, ¿se elabora Okara a partir de la soja transgénica?, recordemos que en algunos países asiáticos el cultivo de alimentos transgénicos está a al orden del día, con lo que encontrar Okara obtenida de soja tradicional podría ser complicado. Si hablamos de los países occidentales el problema es el mismo, una gran parte de la soja utilizada en Europa proviene de países como Argentina y es soja transgénica. Si hablamos de Okara obtenida a partir de soja tradicional, su inclusión en la dieta o en las recetas vegetarianas sí podría resultar beneficiosa.
Foto | Plantfoods