Según los resultados de una nueva investigación arqueológica realizada por expertos de la Universidad de Copenhague, la Universidad de Cambridge y la Universidad College de Londres en el Desierto Negro de Jordania (Oriente Medio), el origen del pan podría ser más antiguo de lo que se creía, los arqueólogos han encontrado nuevas evidencias de la elaboración de pan hace 14.000 años, lo que indica que este alimento lo hacían los cazadores-recolectores 4.000 años antes de la llegada de la agricultura. Esta es la evidencia más antigua que se ha encontrado hasta la fecha sobre la elaboración de pan.
Los resultados de la investigación sugieren que la elaboración de pan con cereales silvestres motivó a los cazadores-recolectores a iniciarse en el cultivo de los cereales, hecho que contribuyó en la revolución agrícola que se produjo en el periodo neolítico. Hay que recordar que la agricultura se inició en diferentes lugares del planeta de un modo independiente y en diferentes fechas, siendo Oriente Próximo la primera región donde, hasta la fecha, se habían encontrado pruebas de la transición de una sociedad de cazadores-recolectores a una sociedad de productores hacia el año 8.500 a.C.
En dos estructuras con piedras que forman una especie de chimeneas, los arqueólogos encontraron 642 restos de alimentos carbonizados, el análisis reveló que se trataba de restos de juncos, leguminosas, plantas pertenecientes a la familia de las coles y cereales silvestres entre los que se encontraban trigo y cebada triturada. En un análisis más exhaustivo en 24 grumos carbonizados, se consideró que correspondían a un alimento similar al pan, ya que contenían tejidos de plantas de cereales, probablemente correspondientes a trigo, avena y cebada silvestre, los investigadores comentan que se trata de migas carbonizadas similares a las que se pueden encontrar en el fondo de una tostadora.
El análisis realizado con microscopía electrónica sugiere, además, que probablemente la harina con la que se tuvo que elaborar esta especie de pan plano (sin levadura), había sido previamente tamizada, también se considera que este pan probablemente se elaboró sobre las brasas de un fuego o sobre una piedra caliente, ya que entonces no se contaba con un horno. Cabe señalar que hasta el momento, los restos más antiguos que sugieren la elaboración de pan se habían encontrado en Çatalhöyük, un antiguo asentamiento de los períodos Neolítico y Calcolítico situado en Turquía y datado con una antigüedad alrededor de los 9.000 años, el nuevo descubrimiento hace retroceder los primeros indicios de la elaboración de pan unos 5.000 años más de lo que se tenía constancia.
Los expertos comentan que los restos de alimentos encontrados en las excavaciones arqueológicas habían sido ignorados durante mucho tiempo, pero en los últimos años se ha demostrado que son muy reveladores y que proporcionan información de gran importancia. Se considera que si se analizaran los restos alimenticios de excavaciones más antiguas, probablemente se podrían encontrar productos elaborados con cereales que recuerdan al pan mucho antes de lo que hasta el momento se ha creído, por ejemplo, durante el periodo Paleolítico, hace unos 25.000 años, lo que podría retroceder mucho más la historia de la elaboración del pan.
Los investigadores creen que los restos hallados no indican que el pan plano fuera un alimento básico, ya que habría sido muy laborioso recolectar y procesar los granos de cereales, se cree que quizá este alimento se preparaba para realizar viajes de larga distancia y contar con un alimento que se pudiera consumir. También se baraja la posibilidad de que se tratase de un alimento elaborado para momentos especiales como, por ejemplo los rituales o algún tipo de celebración.
Para algunos arqueólogos se trata del primer estudio que identifica restos reales de pan en una fecha muy anterior a la constatada hasta el momento, lo que sugiere que en términos de historia alimentaria y como ya hemos comentado, el pan se preparaba mucho antes del establecimiento de la agricultura. Los arqueólogos explican que la identificación de productos similares al pan elaborado con cereales no es una tarea sencilla, ha existido una tendencia a simplificar la clasificación de los restos alimentarios sin que se hayan puesto en contraste con un criterio de identificación, con esta investigación se han establecido un conjunto de nuevos criterios que pueden identificar alimentos elaborados con granos como es el pan.
Esto implica que existió un procesamiento intensivo, la recolección, el descascarillado de los granos, la molienda, la elaboración de la masa y su cocción, la investigación continuará, ya que quedan muchas incógnitas por desvelar, el equipo de investigadores cuenta con nuevos fondos para poder seguir investigando en relación a la elaboración de alimentos durante la transición del periodo neolítico. Podéis conocer todos los detalles de esta investigación que arroja un poco más de luz sobre la historia alimentaria de la humanidad, a través de este artículo publicado en la página web de la Universidad de Copenhague, y en este artículo publicado en la revista científica PNAS (Proccedings of the National Academy of Sciences).