Al parecer, las compras de miel de China realizadas por España son muy elevadas, el año pasado alcanzaron nada menos que 11.327 toneladas, lo que representa más de un tercio de la producción española que se sitúa en unas 33.000 toneladas. China se consolida como el primer proveedor de miel de nuestro país acaparando una cuota del 86’5% en el mercado de la importación que no proviene de países comunitarios. Tanta miel hace sospechar a la Asociación Valenciana de Agricultores y a la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (AVA-ASAJA), ¿nos la dan con miel de China?, ¿están realizando mezclas de miel nacional y miel del país asiático sin informar a los consumidores?, en definitiva, ¿se está defraudando al consumidor?
La miel de China ha suscitado sospechas y por ello, AVA-ASAJA pide al Ministerio de Sanidad una investigación de las empresas transformadoras para determinar si se está mezclando la miel. La práctica serviría para abaratar costes y comercializar el producto a un precio inferior, pero ¿y las garantías sanitarias y la trazabilidad? Dados los casos de fraude, uso ilegal de productos fitosanitarios, antibióticos, etc., que se suceden en China, es lógico pensar que la miel de ese país puede contener productos prohibidos, además la legislación China no es tan restrictiva como la de la Unión Europea y por tanto, hasta la fecha se acepta el uso de las sustancias indicadas. Recordemos que la ley establece que no se puede comercializar miel con restos de antibióticos aunque la cantidad sea insignificante.
Desde hace algunos años hablamos de los peligros que se ciernen sobre las abejas y la producción de miel, y no sólo en nuestro país, recordemos por ejemplo el post La apicultura europea podría desaparecer en 10 años, vaticinio que realizaba la Federación Internacional de Asociaciones de Apicultura dada la pérdida de abejas y producción de miel que se sufre año tras año en Europa. Son varias las causas que provocan el problema, el cámbio climático, el Síndrome de Despoblamiento de las Colmenas, la varroosis o nuevas amenazas como la Vespa velutina nigritorax, una avispa de origen asiático que se ha detectado en nuestro país y que se alimenta especialmente de abejas, de ello hablábamos en el post ¿Peligra la producción de miel en España?
Cada vez se obtiene menos miel y para satisfacer la demanda es lógico que se importe miel de otros países, pero parece que de una forma incontrolada. Como ejemplo se pueden citar los datos facilitados a través del artículo de AVA-ASAJA, en el periodo comprendido de enero a abril de 2011, las importaciones de miel de origen asiático alcanzaron las 4.128 toneladas, según la asociación, más del doble de lo importado en el mismo periodo del año pasado. Con la entrada de miel china se logra frenar la subida de precios por la falta de producción española, la mezcla parece ser la respuesta. Basta conocer los precios de este alimento para llegar a esa conclusión, un kilo de miel producida en nuestro país tiene un coste de entre 2’6 y 3’2 euros, el doble de lo que cuesta la miel asiática cuyo valor máximo no supera los 1’6 euros. Es interesante saber que en el periodo 2003-2004 la Comunidad Europea prohibió la importación de miel china por el contenido de residuos de antibióticos, China tuvo que solucionar el problema con controles más exhaustivos y nuevos certificados que acreditaran su miel, algo que no resultaba coherente, transcribimos unas palabras del presidente de AVA-ASAJA Cristóbal Aguado: “la decisión tomada era como poner a la zorra a cuidar el gallinero: si por aquellas fechas ya fueron incapaces de garantizar la seguridad de los envíos a la UE, ahora que exportan más del doble, difícilmente lo serán”.
La apicultura valenciana es principalmente trashumante, se mueven las colmenas hacia aquellas zonas más adecuadas para la productividad, al respecto os recomendamos ver el documental completo sobre Las abejas y la miel, conoceréis con mucho más detalle la trashumancia de las colmenas. El caso es que Valencia es una de las cuatro comunidades españolas más importantes en lo que respecta a producción, recordemos que se produce una magnífica miel de azahar. Pero también hay que citar otros tipos de miel cuyas características las hacen únicas, un ejemplo es la miel de Galicia. Imaginemos que estos tipos de miel son mezclados con miel sin garantías sanitarias y sin la correspondiente trazabilidad, es un fraude al consumidor y además atenta contra la calidad de la miel producida en nuestro país, ¿quién mezcla vino a granel, con un gran reserva?
Por otro lado, con estas mezclas, de poco sirve que las producciones españolas sean sometidas a controles exhaustivos para garantizar la ausencia de antibióticos o sus magníficas cualidades organolépticas. Mantener los precios de la miel no es una excusa para realizar mezclas sin control, la miel de China se puede comercializar perfectamente siempre que cumpla con la legislación, ¿por qué no dar dos opciones al consumidor y que sea el que decida?, miel de China y miel nacional, sin mezclas. En el caso de realizarlas, es obligado conocer en las etiquetas de los envases qué tipos de miel se han mezclado y si cumplen la normativa en materia de seguridad alimentaria y trazabilidad.
AVA-ASAJA recomienda no fiarse de la miel cuyo precio es más económico y evitar las mezclas, en este caso entendemos cierto proteccionismo con las producciones nacionales, algo en lo que estamos de acuerdo tanto por la calidad, la seguridad o por el deseo de ayudar a las explotaciones nacionales.
Foto | Blumenbiene
6 comentarios
Los consumidores debemos exigir que se nos aporten en el etiquetado todos los datos necesarios para poder decidir. La procedencia, los aditivos, si se produce de forma respetuosa con el medio ambiente o no,si contiene o no organismos modificados geneticamente (OMG/OGM), etc.
El problema es que nuestros legisladores, a saber por que intereses,redactan leyes que permiten cada dia ocultar mas datos a los consumidores.
Luego nos acusan de ser «consumidores desinformados».
La norma general de etiquetado contempla tres posibilidades para declarar el origen de la miel: Miel del país, mezcla de mieles de la CE y mezcla de mieles procedentes y no procedentes de la CE. Los consumidores pueden buscar estas frases en el etiquetado. Con respecto a la última de ellas, lo más probable es que sea entre un 70% y un 80% de miel de China, mezclada con miel de España.
El precio de la miel de China es prácticamente la mitad que el de la miel española, por lo que si vemos en un lineal una miel a precios de entre 4 y 4,5 euros y está marcada con «mezcla de mieles procedente y no procedentes de la CE», debemos esperar que una miel 100% de España, nos cueste casi el doble o al menos cerca de lo 8 €.
Si el consumidor apreciara y valorara la miel de España, no se exportaría la producción nacional, para importar mieles de bajo precio desde China…
Estoy totalmente de acuerdo con el primer comentario, los legisladores están cada vez más en manos de grandes empresas y corporaciones, con lo que ya hacen las leyes a favor de éstos, dejando más abandonados a las pequeñas empresas, que son los grandes generadores de empleo de este país.
Pues nada, ya que no es la administración la que se preocupa de informar o de que se informe debidamente al consumidor, debemos ser las pequeñas empresas del sector las que nos ocupemos de ello. Algo de culpa también tenemos…
Asi es, culpa en parte tenemos los pequeños productos por no informar al usuario, pero debemos resaltar también que gran cantidad de consumidores se van por lo más económico, en muchos casos haciendo caso omiso a las advertencias de productores locales, quería tener la oportunidad de probar el sabor de un producto distinto al mio y me salió con que era una mezcla rara, liquida por encima y espesa por debajo, fue extraño. fue barato
Hoy tenemos formas de garantizarnos la compra de miel española, aunque algunos etiquetados engañan no poniendo claramente la procedencia, hay apicultores que si especifican claramente que su miel es 100% española. Por lo que siempre hay que fijarse en el etiquetado.