Si propusiéramos un juego en el que hubiera que nombrar 10 tipos de queso, decidnos cuántos de ellos serían españoles y cuántos serían quesos de otros países, incluso apostaríamos que conocéis más quesos italianos que de otros países en los que son una de sus joyas gastronómicas, como Francia, Suiza y demás. Nosotros debemos reconocer que nos gustan todos los quesos del mundo, pocas excepciones podemos mencionar, pero también tenemos que decir que de un tiempo a esta parte, estamos especialmente entregados a los quesos españoles.
A decir verdad, siempre hemos sido muy consumidores de queso y nuestros básicos son los quesos españoles, sobre todo quesos gallegos, manchegos, castellanos, catalanes… por proximidad y por gusto, por qué negarlo. Y cuando hace un par de décadas conocimos con más profundidad los magníficos quesos que se elaboran en Andalucía y en la Comunidad Valenciana, se incorporaron a nuestros imprescindibles. Los quesos de Canarias… porque no nos lo ponen fácil.
Claro, que también hemos tenido siempre espacio para los quesos franceses tipo Brie o Camembert, para los quesos italianos como el Parmesano, el Pecorino, el Provolone, la Scamorza, la Burrata… sin obviar otros quesos como el Cheddar, el Gouda, el Stilton, el Emmental o el Halloumi, entre otros. Pero los vamos a dejar de contemplar, a menos que sea para preparar una receta o para una ocasión particular.
¿Sabíais que en España se elaboran más de 150 variedades de quesos diferentes? Y de ellas, 31 tienen un reconocimiento de calidad diferenciada, 27 quesos con Denominación de Origen Protegida (DOP) y cuatro quesos con Indicación Geográfica Protegida (IGP). Profundizaremos más en esta información que proporcionó el presidente de InLac en una acción llevada a cabo en el Salón Alimentaria de Barcelona que se está celebrando esta semana.
Explicaba que los quesos españoles están ganando popularidad en todo el mundo, y así lo mostraron las exportaciones, que lograron un máximo histórico al alcanzar las 117.419 toneladas, un 0,58% más frente a las 116.744 toneladas del año anterior. Pero esto no va acompañado de un gran consumo de quesos nacionales en nuestro país, sino todo lo contrario, también hay un incremento de quesos importados, cifrado en un 10’66% en 2023, según la Agencia Española de Administración Tributaria (AEAT), el año pasado se importaron 361.723 toneladas de queso, siendo los principales proveedores Países Bajos (88.672 toneladas) y Alemania (79.407 toneladas), imaginad el resto.
Obvia decir que los quesos de importación restan mercado a los quesos nacionales, o sea, que los quesos de otros países están desplazando a los quesos de producción española en muchos hogares. Y ya conocemos las consecuencias, porque lo mismo sucede en otras áreas del sector agroalimentario. Escuchamos muchas quejas de consumidores que dicen que en su supermercado habitual no hay tomates, patatas o naranjas españolas, pero luego no les importa comprar Parmesano o Roquefort, en lugar de Galmesán o Valdeón.
La Organización Interprofesional Láctea (InLac) reitera que es fundamental que los consumidores españoles conozcan, valoren y consuman los quesos que se producen en España, recordemos que hace unos cuatro años lanzaron la campaña ‘Quesea con Quesos de España’ y en Gastronomía y Cía os hablamos de ella, podéis recordarlo aquí.
En su última acción en Alimentaria han centrado su objetivo en que los consumidores sean conscientes del compromiso que tienen los ganaderos, las cooperativas y la industria del queso para ofrecer productos de calidad extraordinaria, y de que conozcan la diversidad de quesos que se producen, tanto de forma artesana como de forma industrial, hay de todo y para todos los gustos y momentos.
Por eso, cuando vayamos a hacer una pizza, podemos elegir quesos españoles que funden igual de bien y están incluso mejor que la mozzarella o el emmental, también hay magníficos quesos curados que se rallan igual que el parmesano para la pasta, quesos cremosísimos como la Torta del Casar, el Cremosito de Zújar o el Olavidia con los que podemos servir mil y una delicias, y así un largo etcétera. ¿Queréis conocer quesos españoles que sustituyan a los foráneos en vuestro frigorífico?